La cubana Oria Jiménez Silva, Especialista en lubricante del Grupo de Diagnóstico Integral de la Termoeléctrica Carlos Manuel de Céspedes, de la Zona Industrial de O’Bourke en la provincia de Cienfuegos, integra el casi medio centenar de mujeres trabajadoras de la industria Vanguardia Nacional por 36 años consecutivos.

La también secretaria del Comité del Partido Comunista de Cuba en la empresa cienfueguera agradece al eterno Comandante en Jefe, Fidel Castro y confiesa sentirse feliz: “Gracias al Comandante soy ingeniera. Pude lograr muchas cosas que en otro sistema no se hubiera podido”.

“No puedo estar sin trabajar, confiesa, no me gusta enfermarme, ni estar ausente porque eso forma parte de mi educación. La termoeléctrica es un centro que enseña a las personas a tener un grado de pertenencia y responsabilidades”.

“Tratamos que todo lo que plantean los Lineamientos de la Política Económicas y Social del Partido y la Revolución se cumpla y nuestras mujeres son responsables en cualquier unidad de la planta. Ellas responden por el trabajo, la calidad y la eficacia ” asegura.

“Intervienen en las diversas tareas, dice, y tenemos un potencial de mujeres pasados los 50 años de edad, aunque se han incorporado jóvenes. Compañeras que trabajan en el área productiva y son las que mantienen la producción de la central”.

“Desde que me inicié en la termoeléctrica vimos el trabajo y la responsabilidad que se debe tener en la empresa, agrega, unido a la atención de nuestros dirigentes y a la responsabilidad que nos encomendaron dentro de cada especialidad. Superamos los principales problemas hasta llegar a convertir nuestra industria en la más eficiente de Cuba”.

Por: Mireya Ojeda/RRebelde.