Por Nicanor León Cotayo

Estrujada por un conjunto de graves problemas, a la administración Trump le acaban de echar atrás a una de sus decisiones más importantes, la cancelación del Programa de Acción Diferida (DACA) por sus siglas en inglés.

Como es sabido, este plan  beneficia a los niños que fueron llevados a Estados Unidos por sus padres y que ahora  ya jóvenes y adultos se han ido integrando a la sociedad estadounidense.

A través de este programa durante el gobierno de Barack Obama fueron favorecidos alrededor de 800 mil personas con estudio y trabajo.

Sin embargo, este martes la CNN reveló que un juez federal, James Bates ordenó que “el Departamento de Seguridad Nacional no solo debe continuar aceptando solicitudes de renovación para el programa, sino también admitir y procesar nuevos  casos.”

Este magistrado dio un plazo de 90 días al referido Departamento para ahondar en los motivos de proponer su cancelación.

Y concluyó que la “eliminación de DACA fue arbitraria y caprichosa porque no explicó adecuadamente su conclusión de que el programa era ilegal".

Según CNN Bates acusó al actual gobierno de “aportar un escaso razonamiento jurídico para respaldar tal  decisión.”

¿En qué momento se ha tomado esta decisión?

Sucede en medio de una situación muy adversa para Donald Trump, debido a su bajo nivel de aceptación tanto nacional como internacionalmente.

Varias encuestas de opinión pública lo caracterizan como el presidente más impopular que ha ocupado la Casa Blanca.

Otros elementos a tener en cuenta son la sustitución, despidos  y deserción de varias importantes figuras de su gabinete así como la opinión de la prensa más seria de Estados Unidos que lo califica como incapaz y prepotente.

Sumado a lo anterior, los escándalos sexuales devenidos -incluso- procesos judiciales.

Y cuando, uno tras otro, prestigiosos académicos subrayan el retroceso de ese país como supuesta primera potencia mundial.

O sea, audaces observadores, cada vez con mayor frecuencia, llegan a vaticinarle un futuro entre signos de interrogación.  

(Tomado de Cubasí)