Sistema brasileño de jubilaciones se inspirará en modelo Pinochet

Edited by Maite González Martínez
2019-02-28 08:13:17

Pinterest
Telegram
Linkedin
WhatsApp

Por: Roberto Morejón

El gobierno de Brasil propuso un sistema de pensiones inspirado en la herencia del ex dictador chileno Augusto Pinochet, pues ---considera--- el extremista general dejó enseñanzas válidas.

El también ultra radical de derecha, Jair Bolsonaro, presentó al Congreso un proyecto de reforma de las jubilaciones con una edad mínima para acogerse de 62 años para las mujeres y 65 para los hombres, con obligación de contribuir durante 40 años.

La idea choca con el hábito de los brasileños de retirarse principalmente por años de cuotas, 30 para las mujeres y 35 para los hombres.

Al margen del nuevo patrón quedarían trabajadores rurales, maestros, policías y miembros de las Fuerzas Armadas.

Los tres primeros se someterían a una edad y tiempo de cotización mínimos, mientras los efectivos armados gozarían de privilegios.

Una encuesta y pronunciamientos de sindicatos y del opositor Partido de los Trabajadores reflejan rechazo a la moción legal.

Denuncian el proyecto por violar los derechos gremiales y vincularse a las cotizaciones, cuando en Brasil se registra poca frecuencia de esos aportes a causa de la inestabilidad del mercado laboral.

Peor aún, la recomendación del ex capitán del ejército al Congreso deja fuera a los trabajadores imposibilitados de cotizar para sus pensiones por sus bajos ingresos financieros.

Tanto los medios políticos como sindicales subrayaron las coincidencias de la formulación de Bolsonaro y su neoliberal ministro de Economía, Paulo Guedes, con la práctica de la tiranía en Chile.

Ese país está regido por un modelo de pensiones heredado del régimen de terror que lleva a la pobreza a ancianos al final de su vida activa.

En Chile quedó atrás el sistema de reparto solidario y prevaleció la capitalización individual, o sea, la privatización del programa de prestaciones a cargo de empresas llamadas Administradoras de Fondos de Pensiones, conocidas como AFP.

Esas entidades privadas utilizan los ahorros de los contribuyentes en inversiones especulativas.

Hasta tanto el modelo funcionara según los intereses de las corporaciones, Pinochet obtuvo recursos para el pago de pensiones al recortar los gastos públicos.

Esa contingencia está latente en Brasil aunque bajo el régimen de Michel Temer ya se impuso un tijeretazo mayúsculo.

Con el riesgo de tener que trabajar diez años más que ahora para cobrar la jubilación, los brasileños critican a un gobierno que confundió al electorado con sus promesas de acabar con la corrupción, el crimen y la crisis económica.

Sin embargo, Bolsonaro solo presenta iniciativas polémicas, se debate en discordias con aliados y enfrenta ilegalidades en su círculo de colaboradores.



Commentaries


MAKE A COMMENT
All fields required
NOT TO BE PUBLISHED
captcha challenge
up