Por: Guillermo Alvarado

El principal experto en enfermedades infecciosas de Estados Unidos, Anthony Fauci, reconoció que en una semana y media se duplicaron los casos de covid-19 debido al abandono de las medidas de protección, por lo que el país se encuentra “hasta las rodillas” en la primera ola de la pandemia.

Sin tirarse a fondo, el especialista señaló que la prisa por reabrir la economía en varios estados y ciudades, para volver a alguna forma de normalidad, es la causa del inusitado incremento de contagios y muertes.

Ya la nación norteña cruzó la cifra de tres millones de enfermos confirmados y suma más de 131 mil fallecidos, un escenario preocupante sobre todo porque comienzan a fallar las estructuras para atender a la población.

En Florida, que podría convertirse en el principal foco de infecciones en los próximos días, hay 240 mil casos confirmados y muchos hospitales en medianas y pequeñas ciudades se están quedando sin cupos en las unidades de cuidados intensivos.

Las autoridades de Miami Dade ordenaron el cierre de restaurantes, excepto los que venden comida a domicilio, salones de baile, gimnasios y prohibieron las aglomeraciones. El incremento de pacientes asintomáticos hace más grave la situación porque es casi imposible rastrear a sus contactos.

En Nevada y Arizona la situación también es crítica en los hospitales, con menos del 20 por ciento de su capacidad disponible. De igual manera en Texas los pacientes se han multiplicado de una manera asombrosa. Esta semana se llegaron a registrar hasta siete mil nuevos casos en 24 horas, un ritmo que hará colapsar los centros de salud en breve tiempo.

Pero no son sólo los problemas sanitarios los que están rebasando la capacidad de control de los gobiernos locales y federal. Millones de personas que perdieron su trabajo no pueden enfrentar las necesidades básicas de ellos y sus familiares.

Un estudio publicado por el Centro de Pobreza y Política Social de Estados Unidos, demuestra que el porcentaje de ciudadanos que cayeron en esa situación debido a la epidemia ascendió a un 12,7 por ciento.

En la ciudad de Los Ángeles, California, el porcentaje de las personas sin techo se elevó en 13 por ciento respecto al año anterior y ahora son 66 mil quienes se ven forzados a vivir en las calles.

Este dantesco espectáculo se repite en diversos puntos de Estados Unidos, donde el presidente Donald Trump insiste en minimizar la enfermedad.

Vistas así las cosas, quizás se deba enmendar la afirmación del doctor Fauci, pues la primera potencia mundial en realidad no está hasta las rodillas, sino de rodillas ante la implacable pandemia.