por María Josefina Arce
La voluntad política de los gobiernos del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional del Salvador ha hecho posible que el país centroamericano avance en su meta de erradicar el analfabetismo, una deuda pendiente del pasado neoliberal.
Ya son en la actualidad 59 los municipios salvadoreños que han sido declarados libres de ese flagelo. El Paismal, en el departamento de San Salvador, es el último que se ha sumado a la lista de los que ya su población sabe leer y escribir, un derecho humano fundamental.
Así continúa avanzando en El Salvador el Programa Nacional de Alfabetización como una respuesta del compromiso social del gobierno del presidente Salvador Sánchez Cerén, para mejorar la calidad de vida de la población, a través de la educación, especialmente de quienes no tuvieron antes esa oportunidad.
En este notable resultado Cuba también ha puesto su granito de arena, pues especialistas de la nación antillana han asesorado para la implementación del método “Yo sí puedo”, que se utiliza en varios países del mundo y que solo entre el 2002 y el 2015 permitió alfabetizar a cerca de ocho millones de personas.
Las autoridades salvadoreñas han destacado el apoyo de la Mayor de las Antillas a uno de los programas sociales que más impacto tiene en la población. Elogiaron también la entrega, dedicación, sensibilidad y espíritu solidario en cada día de trabajo de los colaboradores cubanos.
El método cubano Yo, sí puedo fue adaptado a las tradiciones, historia y cultura de El Salvador. La colaboración del archipiélago ha dejado un importante legado en metodologías, cartillas y clases radiales para el aprendizaje que garantiza la continuidad exitosa del plan en la pequeña nación.
Sacar al país de esta condición es un reto para este gobierno y vamos a hacer todo lo posible por declarar libre de analfabetismo a los 262 municipios del país, han expresado las autoridades.
Desde el año 2009, con la llegada al poder del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional por primera vez en el país se concretó seriamente el propósito de eliminar ese flagelo.
De acuerdo con datos oficiales, el índice de analfabetismo en la nación ronda el 10 por ciento, cifra que para el 2019 se espera reducir hasta el 4 %. Para ello continúa con fuerza el programa, al que se han destinado en este año más de dos millones de dólares.
En casas comunales y particulares, centros escolares e iglesias se desarrolla esta iniciativa que ha permitido alfabetizar hasta la fecha a decenas de miles de salvadoreños.
El Programa Nacional de Alfabetización “Educando para la Vida” también promueve la continuidad educativa de las personas jóvenes y adultas que no recibieron o no han complementado sus estudios de educación básica.
“La educación es también un pilar de la sociedad. Como maestro y ex Ministro de Educación, conozco de primera mano los retos. Vamos a trabajar para que todos los salvadoreños tengan acceso a la formación para la vida y la competencia laboral..” ha manifestado Salvador Sánchez Cerén, que desde su llegada a la presidencia ha dado continuidad y consolidado el programa de gobierno del Frente Farabundo Martí de garantizar la inclusión social de todos los salvadoreños, y en la que la educación desempeña un rol esencial.