por Roberto Morejón

Dieciséis años después de la firma de un convenio de cooperación que ha rendido frutos, Cuba y Venezuela se alistan para integrar en lo posible el cumplimiento de los planes económicos respectivos para 2017.

La decimoséptima Comisión Mixta Bilateral que sesionó en Caracas recientemente decidió integrar los procedimientos de desarrollo trazados por los gobiernos, en beneficio de los pueblos.

En palabras del presidente venezolano, Nicolás Maduro, la idea es acercar el Plan de Desarrollo Económico de Cuba y la Agenda Económica Bolivariana con los llamados 15 motores.

Al especificar las ramas de trabajo, el Jefe de Estado destacó que esas líneas de acción son vitales para su país porque tratan de atenuar la dependencia de los ingresos por la exportación de petróleo.

Desde esa premisa, Cuba y Venezuela están listos para avanzar en turismo, petroquímica, minería, industria básica y la rama forestal, sin olvidar las acostumbradas.

Las últimas conversaciones entre La Habana y Caracas en materia de colaboración también permitieron acordar convenios en áreas tradicionales como salud, educación y deportes.

El papel de Cuba aumentará para sostener el proyecto del gobierno bolivariano de extender el número de los médicos integrales comunitarios, hasta cubrir el país con la misión Barrio Adentro, de amplio impacto en la población.

El objetivo de la Revolución Bolivariana es prestar servicios médicos gratuitos a toda la población a través de los 10 mil consultorios populares de atención primaria, una parte de ellos atendidos por cubanos.

En materia deportiva se impulsará la labor conjunta en diferentes localidades, con la participación de 50 por ciento de colaboradores venezolanos y el resto con cubanos.

Los dos gobiernos enfatizarán en la rama agrícola, sobre todo para el incremento de la capacitación técnica de personal venezolano, además de ampliar la labor iniciada en las plantaciones urbanas, con algunos resultados palpables en el país sudamericano.

Varios de los acuerdos recientes entre Cuba y Venezuela están dirigidos a garantizar alimentos y medicinas en ese último mercado, por ser recursos deficitarios a causa de la guerra económica.

Con la intención de trabajar de forma coordinada, las delegaciones respectivas habían firmado en abril de este año los documentos rectores de las relaciones económicas hasta 2030.

Como se aprecia, los gobiernos de Cuba y Venezuela impulsan la cooperación aun en medio de limitaciones económicas.

Los acuerdos de 2016 tienen su antecedente en el Convenio Integral del año 2000 esbozado por los líderes Fidel Castro y Hugo Chávez, cuya memoria estimula a sus seguidores a ser consecuentes con la amistad que ellos fomentaron.