Por: Guillermo Alvarado
Un silencio absoluto prima este sábado en la campaña electoral en Francia, previo a las elecciones presidenciales y legislativas del domingo, que en las últimas horas de la contienda se vieron matizadas por un indeseado elemento, el ataque terrorista perpetrado en la emblemática avenida parisina de Los Campos Elíseos que causó un fallecido y tres heridos.
Como se conoce, el jueves por la noche un sujeto disparó con un fusil de alto calibre y mató a un policía e hirió a otros dos y a un turista. El hecho tuvo una gran repercusión sobre todo por el lugar escogido por los atacantes, una de las arterias más famosas del mundo, así como por el momento, horas antes de la cita con las urnas.
De inmediato el gobierno implantó el estado de emergencia, lo que conllevó a anular todos los actos públicos programados para el viernes, así como ordenar un amplio despliegue policial y militar con el objetivo de garantizar la seguridad de los candidatos y de la población.
El presidente François Hollande emitió un mensaje para tratar de convencer a los electores de que todas las condiciones de tranquilidad estarán garantizadas durante la votación, mientras que la mayoría de los candidatos llamaron a no quedarse en casa y acudir a las mesas receptoras con confianza.
Por supuesto que no faltaron quienes decidieron aprovechar este dramático ataque para, como se dice, llevar agua a su molino y reiterar algunas de sus más polémicas ofertas de campaña.
Entre ellos estuvo la candidata por el Frente Nacional, Marine Le Pen, quien además de criticar con dureza los programas de seguridad de Hollande, reiteró su llamado a restablecer de inmediato las fronteras nacionales y expulsar del país a todos los inmigrantes que pudiesen ser potencialmente peligrosos.
También el conservador François Fillon, aspirante por la organización Los Republicanos, aseguró que de ganar las elecciones e instalarse en el Palacio del Elíseo propondrá renegociar el acuerdo de Schengen, que permite la libre circulación de personas por el territorio de la Unión Europea.
Le Pen y Fillon, junto con Jean-Luc Mélenchon, de Francia Insumisa, y Enmanuel Macron, del movimiento En Marcha, figuran a la cabeza de los sondeos de intención de voto y dos de ellos pasarán a la segunda y definitiva ronda electoral, programada para el 7 de mayo.
Mélenchón, representante de la izquierda francesa, ha tenido un impresionante ascenso en la preferencia de los electores, que lo ven como una alternativa a las propuestas de corte neoliberal, que mantienen la economía estancada y han cercenado importantes derechos laborales.
Dentro de su programa figura fortalecer las relaciones con América Latina y El Caribe, en particular con la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América.
En los resultados de estos comicios tendrá un peso importante la decisión de última hora del 27 por ciento de los votantes, que hasta ahora no tienen claro a quien otorgarán su confianza, por lo que todas las combinaciones son posibles y será hasta la noche del domingo o primeras horas del lunes que sabremos lo que ocurra en definitiva.