Por: Lorenzo Oquendo
Las inundaciones causadas por fuertes lluvias es el reto global que enfrentan este año las poblaciones del planeta con cientos de personas desaparecidas y millones en pérdidas materiales como sensibles afectaciones de estos tiempos.
En muchas regiones las precipitaciones lluviosas provocaron traslado a otras zonas de poblaciones que dejaron sus viviendas y pertenencias por acometidas de las aguas, incluso en áreas donde históricamente eran inapreciables esas contingencias marítimas destructoras de áreas residenciales y campos agrícolas.
Este año la India estuvo entre los países más afectados con muertos que sobrepasaron las mil personas e incluso embalses de agua colapsados, también en Taiwán, Laos, Somalia, Italia, Colombia, Sudán del Sur, Grecia, Vietnam, Bangladesh, China, Japón, Pakistán, España, Bolivia, Francia, Maryland y otros territorios de Estados Unidos declarados por el gobierno del país zonas de desastre debido a la embergadura de los daños ocasionados por indetenibles aguas de inundación.
Así está el mundo este 2018 con las inundaciones marítimas provocadas por inclemencias del cambio climático sin que esté aún en la capacidad humana detener las causas de ese fenómeno que bien conocemos proceden de la quema de combustibles fósiles, a veces de manera irracional y desmedida para alcanzar millonarios resultados económicos procedentes de grandes transnacionales industriales.
Las catástrofes por inundaciones marítimas son el desastre natural que más muertes provoca en nuestro Planeta que de acuerdo con cálculos estadísticos en el siglo XX perdieron la vida por esos impactos de agua más de tres millones de personas, la midad de las víctimas provocados por otros nocivos eventos del clima en esa propia etapa de tiempo.
Debido a las inundaciones los países afectados pasan por tiempos indefinidos de recuperación en edificaciones, cultivos agrícolas, centros de recreación, de servicios, hospitalarios, convertidos en fuerte problema de enfrentamiento social determinado además por la insuficiencia alimentaria al perderse cosechas agrícolas, unido a riesgos de transmisión de enfermedades por contaminaciones de las aguas.
El calentamiento global y sus consecuencias tiene sin dudas aparejados esas afectaciones por fuertes lluvias emanadas de tormentas, ciclones y por temporadas lluviosas en las propias regiones que aumentan el caudal sistemáticamente al incrementarse en iguales dimensiones el calentamiento atmosférico extendido también a situaciones calóricas ambientales que este año igualmente padece el mundo restringido a zonas donde aún el medio ambiente es más soportable.
Pero hasta que extremo reducirá el medio ambiente su capacidad estable sin impactos climáticos ?
Deben por supuesto responder aquellos que aún detienen las medidas establecidas y acordadas en cumbres climáticas para evitar precisamente esas catástrofes ambientales.
