Por María Josefina Arce
Una vez más la UNESCO, Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, ha destacado la labor de Cuba en materia educativa, que a pesar del bloqueo norteamericano la sitúa junto a naciones desarrolladas.
En su informe Mundial de Seguimiento de la Educación 2020, la organización internacional reconoce la política de la Mayor de las Antillas para garantizar una enseñanza inclusiva y de calidad a todos los niveles.
Entre los logros que se mencionan está el ciento por ciento de la escolarización en la etapa pre escolar y valora altamente iniciativas como "Educa a tu hijo", que en un inicio ofreció una alternativa a niños de las zonas rurales y montañosas y que ya se ha extendido a todo el territorio nacional para aquellos menores hasta seis años que no acuden a los círculos infantiles.
Este programa tiene en la familia su principal protagonista y refuerza su papel como célula fundamental de la sociedad, al tiempo que tiene un carácter interdisciplinario, pues en el participan representantes de las instituciones educativas, de salud, culturales y deportivas.
Aunque utiliza la vía no institucional cuenta con todo el apoyo estatal y de organizaciones como la FMC, Federación de Mujeres Cubanas, y los CDR, Comités de Defensa de la Revolución.
No es la primera vez que la UNESCO resulta los avances de Cuba en la educación, la cual ha señalado es un ejemplo a seguir para el mundo.
Ha destacado los avances de la enseñanza especial que hoy cuenta con más de 300 centros con personal altamente calificado para atender a niños y jóvenes con dificultades de aprendizaje.
Esta atención comienza en círculos infantiles y está presente también en el programa " Educa a tu hijo " para orientar a la familia, mientras cuenta con el apoyo de centros de diagnóstico y orientación, que contribuyen a la detección precoz de cualquier limitación educativa.
Cuba por demás, fue la única nación de América Latina y el Caribe en alcanzar la totalidad de los objetivos de la Educación para Todos, establecidos en el año 2000 hasta el 2015 y que comprendían la igualdad de género en la enseñanza, garantizar que jóvenes y adultos tenga iguales oportunidades de acceso al aprendizaje y la universalización de la enseñanza primaria.
Una educación de calidad, gratuita y al alcance de todos ha sido una máxima de Cuba, que destina a esta importante esfera el triple del Producto Interno Bruto que invierte la media de los países ricos.