Buque Papaloapan, de la Armada mexicana, atracó en el puerto de La Habana con un lote de mil 283 toneladas de insumos médicos y alimentos. Imagen / newsinamerica.com
Por María Josefina Arce
Desde enero de 2020 la CELAC, Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, ha estado presidida por México, que ha desarrollado una destacada labor en favor de la integración, la unidad dentro de la diversidad y la cooperación para enfrentar los retos actuales.
A México le ha tocado el gran desafío de desempeñar esta responsabilidad en medio de la COVID 19, que ha puesto a prueba los sistemas sanitarios, pero también ha generado serios daños a las economías.
El gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador ha incentivado la solidaridad y el humanismo entre las naciones miembros, principios que sustentan al mecanismo integrador, nacido oficialmente en 2011 por iniciativa del fallecido presidente venezolano, Hugo Chávez.
Es así que puso en marcha el Plan Regional de Enfrentamiento a la pandemia, en un esfuerzo por lograr una distribución equitativa de insumos médicos para la atención de los enfermos y una respuesta multilateral a la crisis sanitaria. A través de esta iniciativa la CELAC ha llegado con donativos de materiales y vacunas a los países de la región.
Cuba recibió 800 mil jeringuillas y agujas para apoyar su campaña de vacunación, que realiza con inmunos propios, desarrollados por nuestros científicos, a pesar de las dificultades que impone el bloqueo norteamericano.
También recibió otros materiales necesarios para el enfrentamiento a la dolencia y alimentos, ante las afectaciones ocasionadas a la economía por la emergencia sanitaria mundial y el mantenimiento de la política hostil estadounidense.
A finales del pasado mes de junio fueron donadas por México 400 mil vacunas contra la COVID 19 a Guatemala, Honduras y El Salvador. Ya con anterioridad había enviado 800 mil inmunos a Argentina y otros 400 mil a Belice, Bolivia y Paraguay.
En los últimos días envió segundas dosis a Honduras y Bolivia y más adelante, confirmó la Secretaria de Relaciones Exteriores, se harán otras donaciones a Jamaica, Paraguay, Belice y Nicaragua.
Pero la nación latinoamericana también ha mantenido una postura digna y ha defendido el respeto a la soberanía y la no injerencia en los asuntos internos de otros estados, principios en los que se gestó la CELAC. Es así que ha condenado el reforzamiento del bloqueo norteamericano contra Cuba, en medio de una pandemia, y las acciones desestabilizadoras de los últimos meses desarrolladas desde Estados Unidos.
Ha mantenido en todo momento una postura crítica sobre la OEA, Organización de Estados Americanos, un bloque hemisférico subordinado a Washington y que se ha prestado para desestabilizar países y apoyar golpes de estados.
Igualmente ha promovido el diálogo como vía para la paz y la concertación de acciones que permitan avanzar en el desarrollo de las sociedades. En ese camino auspició, junto a Noruega, las conversaciones entre el gobierno de Venezuela y la oposición, intercambio que se ha desarrollado en territorio mexicano.
Ha buscado asimismo, diversificar las relaciones del continente con otras regiones del mundo. En ese contexto promovió la celebración a principios de este mes el Primer Foro CELAC-China sobre reducción de la Pobreza y el Fomento del Desarrollo.
Este fin de semana tendrá lugar en territorio mexicano la Sexta Cumbre de jefes de estado y de gobierno de la CELAC, en la que está previsto que otro miembro sea designado para la presidencia pro tempore del mecanismo que asumió México en 2020 y 2021, y cuya labor ha sido calificada de exitosa y un ejemplo de cuánto se puede lograr a través de la solidaridad y la cooperación.