Imagen / RHC / Mireya Ojeda

Por: Roberto Morejón

El sistema de salud en Cuba constata la atenuación de la reciente ola provocada por ómicron, variante de la Covid-19 que, como en el resto del mundo, colocó a este país en tensión, aunque afortunadamente el avance de la inmunización aportó sus beneficios.

La mayor de las Antillas consolida la tendencia a la reducción de casos, bordeando o inferior a los mil diarios, luego de un comportamiento pico.

Expertos destacaron que el repunte quedó por debajo de anteriores, comportamiento atribuido al exitoso progreso de la vacunación con antídotos nativos.

Gracias a que 88 por ciento de los cubanos cuentan con el esquema completo de tres dosis con biológicos autóctonos Abdala o Soberana y cursa la de refuerzo, la nación caribeña ha podido sortear en circunstancias más propicias el embate de ómicron, menos agresivo, pero sumamente contagioso.

La mayor de las Antillas diseña una nueva normalidad aun en medio de la presencia de ómicron, para lo cual mantiene atinadamente determinadas restricciones y medidas higiénico-sanitarias, a la par de que la economía, el turismo y el curso escolar prosiguen sus actividades, sin descuidarse.

No obstante, resulta apropiado, como ya se hace, vigorizar la atención de los adultos mayores, fundamentalmente con enfermedades de base, muy vulnerables ante la presente variante de la Covid-19.

El gobierno y el sistema de salud enfatizan oportunamente en la importancia de conducir a los adultos mayores con presteza al sistema hospitalario, tan pronto manifiesten síntomas.

El sistema primario de salud y esencialmente el médico de la familia tienen la misión de seguir de cerca el estado, sobre todo, de los más longevos, pues ellos han aportado, lamentablemente, el caudal más alto a las cifras recientes de fallecidos.

Mientras se robustecen los procedimientos en tal sentido, saltan a la vista los aciertos de la estrategia del país en el desarrollo de vacunas autóctonas.

Efectivos incluso en medio del azote de ómicron, los inyectables nativos protegen y permiten a las autoridades eliminar la regla de la cuarentena obligatoria para viajeros procedentes de varios países africanos.

Cuba también entra en la fase de entrega paulatina del Certificado Digital de Vacunación como resultado del compendio del proceso profiláctico, tan favorable que ha despertado interés en otras naciones.

El embajador de Nicaragua en Cuba, Wilfredo Jarquín, valoró de muy positiva la inmunización de los niños de su país con los biológicos enviados por la tierra de José  Martí.

Si bien el bloqueo estadounidense también complica el alistamiento de sus vacunas, Cuba continuará con ellas para la máxima cobertura de sus nacionales y aporte a otras naciones.