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Por María Josefina Arce.
Cuba y China mantienen una fructífera colaboración en diversas esferas como la educación, que abarca a los distintos niveles de enseñanza desde la primera infancia, educación especial hasta la técnico-profesional.
En la formación universitaria se ha materializado en diversos proyectos conjuntos entre centros de altos estudios de las dos naciones, que buscan consolidar y ampliar esta provechosa relación.
En este camino nuevas iniciativas han ganado terreno en los últimos días. Las Universidades de La Habana y la de Shanghái para la Ciencia y la Tecnologia abrieron un Laboratorio para el diagnóstico del cáncer y la terapia energética, resultado de la firma en 2020 de un convenio marco entre las dos instituciones.
También fue inaugurado un centro conjunto Internacional, con oficinas en La Habana y Beiying. La Universidad de la capital cubana se encargará de atender los vínculos con su homóloga de Shanghái y con otras del gigante asiático.
El centro cubano de altos estudios ha establecido acuerdos igualmente con la Normal de Shanghái, de Estudios Internacionales de esa ciudad y la Normal del Este de China, así como con otras de las provincias de Henan, Shandong y Jiangsu.
Asimismo las Universidades de Estudios Internacionales de Hebei y la Ignacio Agramonte Loynaz, de la provincia cubana de Camagüey, trabajan para la apertura de un Instituto Internacional de Investigaciones sobre Inteligencia Artificial. En el proyecto también participa la Universidad Central Marta Abreu, de Las Villas.
La cooperación en esta rama también incluye la capacitación del personal docente y la enseñanza del idioma chino en la Mayor de las Antillas. Ya desde hace unos meses en la escuela secundaria Fructuoso Rodríguez, ubicada en la capital, 130 adolescentes reciben clases de chino.
Para ayudar al aprendizaje Beiying donó libros, que incluyen cuadernos de ejercicios, manuales y diccionarios, así como algunos juguetes tradicionales.
La lengua del país asiático se imparte igualmente desde 2009 en el Instituto Confucio de la Universidad de La Habana, que además, difunde la cultura china, a través de actividades docentes, investigación científica y promoción artística y deportiva.
Cuba y China mantienen excelentes relaciones en diversas ramas, pero sobre todo una larga amistad, cimentada en la presencia en nuestro país de ciudadanos de esa nación que en el siglo diecinueve participaron en nuestras guerras de independencia, y se integraron social y culturalmente, contribuyendo a la conformación de la nacionalidad cubana.