Vacunación contra la poliomielitis en Cuba

por María Josefina Arce

Esta semana comenzó en Cuba una nueva campaña de vacunación contra la poliomielitis, una enfermedad altamente infecciosa, que provoca parálisis, puede ocasionar la muerte, y que antes del triunfo de la revolución era un mal endémico en el territorio cubano.

Conformada en dos etapas , la primera concluye este sábado y la próxima semana es de recuperación para los niños que por una u otra causa no recibieron la dosis. En abril comienza la segunda, con recuperación en mayo.

De acuerdo con los especialistas, nuestro país sufrió cinco grandes epidemias de esta dolencia en el siglo XX, la última en 1955. Sin embargo, cuarenta años después,  recibía la Certificación de Erradicación de la Poliomielitis por la OPS, Organización Panamericana de la Salud.

Cuba se convertía así, en el primer país de las Américas en lograr la eliminación de esta enfermedad, gracias al esfuerzo desplegado y la voluntad política del estado de proteger a sus niños y lograr que la poliomielitis dejara de ser un problema de salud.

En fecha tan temprana como 1962 se ponía en marcha por el gobierno revolucionario en el territorio nacional la primera campaña de vacunación, toda una proeza, en la que el pueblo desempeñó un decisivo papel.

Un artículo del diario Granma recuerda que a los Comités de Defensa de la Revolución, creados dos años antes, correspondió realizar el censo de la población a vacunar, que en aquellos momentos estaba compuesta por los niños desde un mes de nacidos hasta los 14 años de edad.

Vital fue también el apoyo de otra organización nacida tras el triunfo revolucionario, la Federación de Mujeres Cubanas, que se volcó de lleno a informar a las madres y a la población en general, de la importancia de aplicar a sus hijos la vacuna

Aquella histórica  campaña fue el inicio. Cada año el territorio cubano es escenario de la inmunización de nuestros pequeños, que nunca, ni aún en las más complejas condiciones económicas se ha detenido.

Y aunque el genocida bloqueo, impuesto desde hace más de 60 años por Estados Unidos conlleva severas limitaciones, el esfuerzo de las autoridades y el personal sanitario han hecho posible seguir protegiendo a nuestra población.

Incluso en la pandemia de la COVID 19, en el país se aplicó el inmunogeno antipoliomielitis, observando las medidas necesarias para evitar el contagio de los infantes, sus madres y el personal de salud.

Precisamente la OMS, Organización Mundial de la Salud, llamó durante la emergencia sanitaria mundial a no descuidar la vacunación contra la Poliomielitis, pues una cobertura de inmunización inferior al 95% puede hacer  regresar con fuerza esa enfermedad discapacitante y mortal.

Esta nueva Campaña Nacional de Vacunación Antipoliomielitica, la sexagésimo segunda que se desarrolla en Cuba, es una muestra más de la voluntad política del estado de preservar la salud de los cubanos.