Sequía en Cuba
Por: Roberto Morejón
Chubascos asociados a un débil frente frío que afectó a parte del occidente del país entusiasmaron a los cubanos residentes, deseosos como están de beneficiarse de la lluvia, ante una aguda sequía.
Más de 400 mil personas sufren el castigo de la carencia de precipitaciones fluviales en lo que expertos describen como sequía meteorológica.
Se trata de un fenómeno acaecido cuando se prolonga el período sin ese beneficio o simplemente se comporta por debajo de la media.
Si bien la mayor cantidad de personas perjudicadas por ese tipo de déficit radica en la oriental Guantánamo, las provincias de Camagüey, Santiago de Cuba, Holguín y
En el caso de esa última las cuatro cuencas abastecedoras de agua a la capital cubana están en descenso, con más de 47 mil personas afectadas directamente por la aridez y de ellas casi 4 mil reciben el preciado líquido mediante camiones cisterna.
Es cierto que es habitual que en los primeros meses de cada año y hasta mayo las lluvias sean espaciadas porque la mayor de las Antillas afronta la etapa seca.
Pero en el caso de 2023 se presenta la característica de ser un año más crudo porque el período húmedo anterior no fue muy favorable.
Con poco más de la mitad de su capacidad de llenado cubierta, los embalses son la esperanza de muchos pobladores y campesinos, pero el uso debe ser dosificado.
Las autoridades de Recuerdos Hidráulicos insisten en explicar a los cubanos la importancia de no malgastar agua ante un previsto período seco más largo de lo usual.
No se habla de un fenómeno sorpresivo porque desde hace más de tres décadas las fases de desecamiento son más frecuentes, extensas y prolongadas en Cuba.
Los entendidos explican que el fenómeno tiene su origen en la persistente y cada vez más expansiva influencia del anticiclón del Océano Atlántico sobre el Caribe.
Científicos, licenciados y otros entendidos trabajan en un proyecto de investigación dirigido a mejorar el vaticinio sobre las etapas de sequía a través de un pronóstico estacional de precipitaciones.
Mientras sus resultados no estén sobre la mesa, la economía nacional, estremecida por el impacto del bloqueo estadounidense, pasa a tener más complicaciones al sobrevenir la aridez.
De manera que aun aguarda a los cubanos una etapa de apremios en cuanto a la disponibilidad de agua hasta el inicio del ciclo lluvioso.