La tenacidad, valentía y sacrificio del Ejército Rojo logró frenar el genocidio más grande
de la historia. Foto tomada de Archivo/Prensa Latina
Por María Josefina Arce
Hoy es el Día de la Victoria. Hace 78 años la Alemania nazi firmaba en Berlín su rendición incondicional ante la entonces Unión Soviética, durante la Segunda Guerra Mundial, el más largo y sangriento conflicto bélico del siglo XX.
Decisiva para lograr la derrota del fascismo fue la heroicidad del pueblo soviético, que de 1941 a 1945 desarrolló la Gran Guerra Patria para hacer frente a la intervención extranjera.
La tenacidad, valentía y sacrificio del Ejército Rojo logró frenar el genocidio más grande de la historia. Entre 50 y 70 millones se cifra la pérdida de vidas humanas a causa de esa contienda, que dejó unos 27 millones de muertos en el pueblo soviético.
Precisamente, el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro Ruz (1926-2016), destacaba que aunque es justo reconocer el papel desempeñado por la resistencia interna en los territorios europeos ocupados y la contribución a la victoria de todas las fuerzas que participaron en la alianza antifascista, un hecho incuestionable es que fueron el pueblo y el ejército soviético quienes llevaron el peso fundamental y decisivo en la derrota del fascismo.
La Segunda Guerra Mundial estuvo marcada por hechos de enorme repercusión, como el exterminio masivo de judíos y el uso por primera vez de las armas nucleares.
En agosto de 1945, cuando ya se había firmado la rendición alemana, lanzaba Estados Unidos bombas atómicas en las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, en Japón, aliado de Berlín. Cuatrocientas MIL personas murieron y hasta la actualidad se mantienen los efectos de esa criminal acción.
Hoy no ha desaparecido en el mundo el fantasma del fascismo, que Fidel Castro Ruz calificará como "la expresión más acabada del pensamiento reaccionario burgués e imperialista".
Hay por supuesto diferencias, acorde con los tiempos, pero también similitudes en varios aspectos. Es una realidad de muchas naciones la existencia de grupos neonazis, que reverencian la simbología fascista y su ideología.
En Estados Unidos, por ejemplo, con la llegada en 2017 de Donald Trump a la presidencia se incrementó el número de grupos de supremacistas blancos, incentivado por su discurso de odio y racista.
Asimismo, ha ido ganando terreno la extrema derecha, con muchos puntos en común con el fascismo como la xenofobia. La cuestión migratoria es uno de sus temas preferidos.
Hoy es una fecha de gran relevancia para el mundo, que fue escenario en pleno siglo XX de una de las más grandes tragedias y catástrofes humanitarias de su historia.