Crece afluencia en comedores comunitarios

por María Josefina Arce

En Argentina la pobreza se sitúa en más de 57 %, un índice que muchos temen pueda seguir escalando, ante las medidas adoptadas por el gobierno del presidente Javier Milei y que están llevando al rápido empeoramiento de las condiciones de vida de muchas familias argentinas.

De acuerdo con un estudio del Observatorio Social de la Universidad Católica, en la actualidad unos 27 millones de ciudadanos son pobres en la nación suramericana, de los cuales 7 millones serían indigentes.

Señala la investigación que la depreciación de la moneda y el alza de los precios de productos básicos ha devastado los salarios que perciben muchos ciudadanos.

Y la situación es bien  crítica para los más necesitados  que incluso, han visto como también se les dificulta el aliviar su penuria en los comedores comunitarios, donde acuden cada día más personas, pero el gobierno ya no les entrega comida.

Agencias de prensa citan a organizaciones sociales, que manejan muchos de estos lugares y que señalan que entre diciembre y febrero ha aumentado en 50% el número de personas que acuden en busca de comida.

Sin embargo, las autoridades han congelado la entrega de alimentos y fondos a los comedores comunitarios, mientras se audita el sistema actual.

Ya se han realizado varias protestas, en un intento por obtener una respuesta del gobierno que no llega.

Incluso frente al Ministerio de Capital Humano, cuya titular Sandra Pettovello se negó a recibir a ciudadanos y organizaciones sociales.

La última de estas manifestaciones  tuvo lugar en las últimas horas frente al Ministerio de Economía, en el centro de Buenos Aires, la capital.

Además, la Unión de Trabajadores de la Economía Popular presentó un amparo ante la justicia para que el Ministerio de Capital Humano entregue insumos a esas instalaciones que suman unas 41 mil en todo el territorio argentino y son reconocidas por el Estado.

El pedido de amparo apunta que la situación actual no es por falta de recursos, sino por la ausencia de voluntad política de cubrir los derechos básicos fundamentales como la alimentación.

El panorama es bien complejo para muchos argentinos, y todo indica que no va a mejorar. Las medidas del nuevo gobierno presidido por Milei están llevando a un aumento de la pobreza y la desigualdad en la nación.