Por Nicanor León Cotayo
«Dinosaurios» acampados allí tratan de sabotear la apertura de esa institución, luego de que fracasaron en hacer lo mismo con las respectivas Embajadas.
El sitio MiamiDiario informó este jueves que su Parlamento sugirió al presidente Obama no tolerar la apertura del consulado de Cuba en ese territorio.
Sus directivos (comisionados) aprobaron un documento rechazando tal eventualidad.
¿Argumento? Que podría «enardecer pasiones y crear riesgos de seguridad».
Miami-Dade, recordaron, es el municipio con la mayor cantidad de cubanos fuera de la isla.
La idea, presentada por el comisionado Esteban Bovo, argumenta que muchos de sus habitantes «huyeron de la opresión y la injusticia del gobierno» de Cuba.
El señor Bovo atacó el acercamiento bilateral y, al mismo tiempo, cuestionó que impuestos abonados por sus inmigrantes cubanos finalicen protegiendo a un consulado «que apoya a la dictadura».
La resolución, además, pide ubicarlo en otras ciudades, como Tampa o Luisiana, mientras hace mención a un sondeo del Miami Herald que sitúa en menos de la mitad a los cubanos residentes en aquel estado que avalan su apertura.
El alcalde de Miami, Tomás Regalado, también ha rechazado en varias ocasiones esa posibilidad agitando «razones morales» y de seguridad.
Pero, ¿qué han dicho públicamente numerosos cubanos radicados por allá?
Un significativo ejemplo. El 13 de febrero de 2014, la bipartidista Atlantic Council, radicada en Washington, ofreció el saldo de una investigación que hizo al respecto.
Un 56 por ciento del total de los entrevistados pidió normalizar las relaciones bilaterales.
De igual manera se pronunció el 79 por ciento de los interrogados de ascendencia cubana, que viven en la Florida, en su mayoría.
Tal hecho recorrió desde importantes ambientes políticos y periodísticos del mundo, hasta lamentos de la ultraderecha de origen cubano asentada en aquel estado sureño.
A The New York Times correspondió entonces uno de los más tajantes criterios, al decir que, luego de 50 años de hostilidad contra la isla, una encuesta presentó a la mayoría de los estadounidenses inclinados a normalizar las relaciones con esta.
Después acogió una trascendental aseveración del Atlantic Council que describió lo sucedido como una reflexión «sin precedentes» del cambio de actitudes norteamericanas hacia Cuba, «sobre todo en la Florida».
Un análisis de la Associated France Press (AFP) originado en Washington indicó que los organizadores del sondeo valoraron sus resultados como «sorprendentes».
Citó al senador demócrata Patrick Leahy cuando dijo: «Es ilógico mantener hoy una política definida en la época del presidente Eisenhower» (1959-1960).
Fue entonces que llegó una declaración escrita de la congresista republicana Ileana Ros-Lehtinen.
¿Qué dijo ella? La encuesta de la Atlantic Council «no me sorprendió» porque su agenda intentaba ayudar a las desastrosas políticas del presidente Obama hacia Cuba.
El texto añadió que en su presentación tomó parte el republicano Jeff Flake, a quien Ileana denomina «el animador de Castro en el Senado».
He ahí una credencial de oro en cuanto a quiénes son los actuales enemigos del pendiente consulado cubano en Miami.
(Tomado de Cubasí)