Por: Waldo Mendiluza
La Habana, 2 abril (RHC) Las actuales relaciones entre Cuba y Estados Unidos están marcadas por la hostilidad de Washington, pero ese no debe ser necesariamente el futuro de las mismas.
Así piensa el congresista demócrata por Massachusetts James McGovern, quien visitó la nación caribeña a finales de marzo con una amplia agenda cumplida.
En declaraciones a medios de prensa, el representante por el segundo distrito del nororiental estado opinó que unos vínculos normales con Cuba forman parte de los intereses de su país.
“Creo que relacionarnos es algo bueno. Estados Unidos debería levantar el bloqueo económico y las restricciones de viaje a los norteamericanos”, precisó.
De acuerdo con McGovern, quien ha estado varias veces en la mayor isla de las Antillas y es un promotor de los buenos nexos bilaterales, la mayoría de los norteamericanos coincide con su visión.
Creo que en la Cámara de Representantes, dominada por los demócratas, también lo ven así, pero la administración de Donald Trump tiene otra postura, con la cual no concuerdo, señaló.
El político de Massachusetts, catalogado de uno de los más liberales dentro del Congreso, aseguró que vino a la isla a dialogar y a conocer su realidad, en un contexto marcado por la escalada de la agresividad de la Casa Blanca contra el país caribeño.
Nuevas sanciones, una retórica incendiaria y amenazas de recrudecer el bloqueo forman parte de las posiciones anticubanas del gobierno de Trump en los últimos meses.
Particular preocupación despierta la posibilidad de aplicar al pie de la letra el Título III de la Ley Helms-Burton, iniciativa vigente desde 1996 que apuesta por el cambio de régimen en Cuba, a partir de instrumentos como la asfixia económica.
Ese acápite permite a nacionales estadounidenses presentar ante tribunales de la nación norteña demandas contra todo extranjero que “trafique” con propiedades nacionalizadas en la década de 1960, en aras de privar a la mayor isla de las Antillas de la inversión extranjera clave para su desarrollo.
En un encuentro con periodistas, McGovern defendió la anulación de la polémica ley, que en Cuba califican de engendro jurídico y alertan sobre su contenido extraterritorial contrario al Derecho Internacional y la Carta de la ONU.
Hasta la llegada de Trump a la Oficina Oval, sus antecesores habían suspendido la aplicación del Título III, incluso el propio magnate inmobiliario lo hizo en sus dos primeros años de gestión, lo que el congresista consideró una buena idea y un hecho razonable que cada presidente, republicano o demócrata, lo hiciera.
Sin embargo, en enero pasado Trump decidió suspenderlo por solo 45 días, mientras que a principios de marzo, el Departamento de Estado anunció la cancelación por otros 30, pero permitió que se presenten demandas judiciales contra más de 200 empresas cubanas incluidas en una lista unilateral de sanciones económicas.
“No es constructivo ni productivo y me decepciona que esa no sea la dirección en la que se mueve la actual administración”, advirtió McGovern a la salida de un encuentro con estudiantes del Instituto Superior de Relaciones Internacionales, con quienes conversó acerca de diversos temas globales.
El Congreso
La Ley Helms-Burton codifica el bloqueo impuesto a la isla, por lo que es en el Capitolio donde puede ponerse fin a esa política, aunque el poder ejecutivo tiene margen de maniobra para reducir considerablemente su impacto, lo cual en alguna medida demostró Barack Obama en 2015 y 2016, cuando ambos países vivieron un escenario de acercamiento inédito en muchas décadas.
Según McGovern, el control demócrata de la Cámara de Representantes permitiría que se apruebe en votación un proyecto para levantar las restricciones de viajes (por el bloqueo los estadounidenses no pueden hacer turismo en Cuba).
“Me gustaría pensar que también tenemos los votos para terminar el embargo (bloqueo), pero no es igual de claro si en el Senado ocurriría lo mismo o si su liderazgo siquiera posibilitaría el voto”, dijo en alusión al dominio republicano en esa instancia.
El congresista expresó además que de cualquier manera, el presidente Trump no firmaría tales iniciativas.
Creo, no obstante, que debemos trabajar pensando en un futuro cercano, para cuando existan las condiciones, comentó.
McGovern se reunió en esta capital con el presidente Miguel Díaz-Canel, quien en su cuenta en Twitter destacó el encuentro, y con la directora general para Estados Unidos de la Cancillería, Johana Tablada.
Asimismo, recorrió el museo de la Finca Vigía, casa donde vivió desde 1940 hasta su muerte en 1961 el escritor norteamericano Ernest Hemingway.
En el lugar, participó en la inauguración de un taller de conservación de documentos relacionados con el Premio Nobel de Literatura de 1954.
Desde hace 15 años estoy involucrado en acciones conjuntas con Cuba para restaurar la Finca Vigía y su contenido, creo que tenemos mucho que celebrar con lo avanzado, señaló a Prensa Latina.
El congresista calificó de fructífera y de un honor la colaboración con los cubanos en el proyecto dirigido a preservar la casa donde vivió Hemingway. (Fuente: PL)