Foto: Hipertextual
Por: Alfredo García Almeida*
Diez y nueve miembros del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), murieron después de que sus “beepers” explotaran en Deir ez-Zur, en el este de Siria, informó el pasado miércoles noticias saudí, Al-Hadath. El “beeper”, es un medio de comunicación, inventado en EEUU en la década de los 20 del pasado siglo, que recibe mensajes cortos y alerta a su usuario con un pitido, permitiendo a periodistas, médicos, técnicos y directivos, recibir mensajes incluso desde zonas remotas.
Otros 150 miembros de la Guardia Revolucionaria Islámica, también resultaron heridos en las explosiones, informó la Radio del Ejército. El informe se publicó un día después de que unos 4.000 miembros de Hezbolá, sufrieran la explosión de sus “beepers” en un ataque atribuido a Israel al Mossad y a las Fuerzas de Defensa de Israel. El embajador de Irán en el Líbano, Mojtaba Amani, también resultó herido en el ataque, informó la agencia de noticias estatal iraní, Mehr.
Los hospitales colapsaron por la llegada masiva de heridos, desde, Adaisseh, Markaba, Blida, Maroun El Ras y Chihine. Hizbolá acusó al Estado judío, de estar detrás del ataque a gran escala contra los “beepers” que emplean sus miembros. Aunque se especuló con un posible ciberaataque, el diario, The New York Times, citando fuentes de seguridad, aseguró que el Mossad logró manipular cada uno de los aparatos antes de su llegada a Líbano y colocó una pequeña carga de explosivo junto a la batería. Los dispositivos estaban programados, para emitir un pitido durante varios segundos antes de explotar.
La empresa taiwanesa, Gold Apollo, negó haber fabricado los dispositivos, AR-924, que ocasionaron la explosión, y aseguró que la responsable de producirlos es una compañía europea denominada BAC, con sede en Budapest. Como es habitual en estas ocasiones, Israel ni confirmó ni desmintió su implicación.
El periódico israelí, The Jerusalem Post, indicó que fue una operación conjunta del Mossad y de la Inteligencia militar israelí; y el portal Axios, dijo que se eligió lanzar el ataque “por temor a que el grupo pudiera haber descubierto su operación secreta”. La orden final se dio a las pocas horas de una reunión en Tel Aviv, entre el principal asesor del presidente, Joe Biden, para el Medio Oriente, Amos Hochstein, con Benjamín Netanyahu y el ministro de Defensa, Yoav Gallant, aunque los estadounidenses insisten en que ellos no tenían información alguna.
El diario libanés, Al Akhbar, próximo a Hizbolá, señaló que “el enemigo logró asestar su golpe más duro al cuerpo de la Resistencia Islámica desde el comienzo del conflicto, en una operación de seguridad excepcional en términos de capacidad de alcanzar objetivos y medios de comunicación. El enemigo demostró la superioridad tecnológica y de Inteligencia”. Trascendió que el máximo responsable de Hizbolá, Hasán Nasrala, hablará mañana para valorar la situación.
* periodista, analista internacional colaborador desde Mérida, Yucatán.