Agricultura en Cuba

por María Josefina Arce

La producción de alimentos  aún  no alcanza los niveles requeridos en el país, afectando el bienestar de la población. De ahí que sea uno de los temas que se analizará con mirada crítica en el Octavo Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, que durante dos días sesionará en La Habana.

Es este un tema sobre el que reiteradamente ha insistido la dirección del país, y al que ha prestado una especial atención, consciente de su  incidencia en el día a día de los cubanos.

Las autoridades han ido adoptado diversas medidas para eliminar las trabas que frenan el avance agropecuario y la producción de alimentos; sin embargo, todavía no se alcanzan los niveles requeridos para satisfacer la demanda interna y reducir los precios.

Constante es el  chequeo de  los procesos productivos en los territorios. Por tanto, ha sido una prioridad  en las distintas visitas que al más alto nivel ha efectuado la organización partidista a los diversos municipios del  país.

Durante estos recorridos el primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, Miguel Díaz Canel, ha reiterado la necesidad de buscar alternativas y sin desconocer la experiencia ya existente, lograr una mayor introducción en el campo y en la industria de los logros de la ciencia y la innovación.

Es una urgente necesidad ante la compleja situación económica que vive la nación, dado el reforzamiento del bloqueo norteamericano y la arbitraria inclusión de Cuba en la  lista de países supuestamente patrocinadores del terrorismo.

La agricultura es uno de los sectores al que golpea con fuerza el cerco económico, que obstaculiza la adquisición de insumos, equipos y financiación. Solo entre marzo de 2022 y febrero de 2023 las afectaciones se contabilizaron en más de 273 millones de dólares.

Ante este crítico  panorama y para poder dar respuesta a las demandas de la población,  ha convocado  Díaz Canel a multiplicar los buenos ejemplos que hay a lo largo y ancho del país, y lograr una adecuada Integración entre todos los actores económicos que favorezcan los sistemas agroalimentarios locales.

Precisamente se insiste en aprovechar todas las potencialidades existentes en los territorios, en un uso óptimo de la tierra, en el incremento de las áreas sembradas, en una gestión eficiente de la fuerza laboral y un mayor control para evitar violaciones y casos de corrupción.

Cuba está llamada a sustituir importaciones, a alcanzar la soberanía alimentaria con su propio esfuerzo. Es este un tema incluido permanentemente en la agenda  de la máxima dirección del país, pero  que concierne a todos.