Berlín, 18 jul (RHC) Más de 500 niños del coro católico alemán de la ciudad de Ratisbona fueron víctimas de malos tratos o violaciones, entre 1945 y la década de 1990, reveló un informe publicado.

Las nuevas pruebas fueron brindadas por Ulrich Weber, abogado contratado por la Iglesia para esclarecer los sucesos del caso, el cual estalló en 2010 y es considerado como uno de los peores escándalos de esa institución religiosa en Alemania.

Según el reporte de Weber, de la cifra total de niños y adolescentes del coro de Regensburger Domspatzen de la catedral de esa localidad, ubicada al sureste de Alemania, unos 500 sufrieron maltrato físico y otros 67 agresiones sexuales, incluyendo violaciones.

No obstante, el letrado declaró, durante la presentación este martes del resultado final de su investigación, que el número total podría ascender a más de 700 jóvenes.

En el texto, el abogado recogió varias impresiones de las víctimas, muchas de las cuales describieron su paso por ese coro milenario y mundialmente conocido como 'una prisión, un infierno y un campo de concentración' y el peor momento de sus vidas.

El balance presentado por Weber arroja un resultado superior a las cifras publicadas en enero de 2016, cuando otro documento fijó la cuota en 231 afectados, mientras en febrero de 2015, las autoridades católicas locales solo reconocieron a 72.

'Todos cometimos errores y hemos aprendido mucho', reaccionó en un comunicado el obispado de Ratisbona, quien desde entonces revisó y adaptó la pedagogía en el seno del coro.

A partir de la primera denuncia, la mayoría de los casos prescribieron, por lo que los 49 presuntos autores de actos de violencia identificados en el informe no serán juzgados por el momento.

Sin embargo, algunos reportes indican que cada una de las víctimas deberá recibir hasta 20 mil euros de indemnización.

Este escándalo es uno de los tantos que sacudió en los últimos tiempos a la Iglesia católica.

Tanto el papá emérito Benedicto XVI, cuyo hermano fue director del mencionado coro entre 1964 y 1990 y no está exento de culpabilidad, así como su sucesor, Francisco, pidieron perdón por los casos de pederastia en el seno del clero.

con informacion de prensa latina