Panamá, 7 jun (PL) Ciiudad de Panamá y la vecina provincia de Panamá Oeste, regresarán este lunes a la cuarentena total por la explosión de contagios con un récord de 541 nuevos casos y 16 fallecidos en la última jornada.
En ambos territorios, que concentran los más notables focos de infección y también la mayor población del país, un toque de queda anunciado el jueves pasado rige desde las 17:00 hora local de ayer hasta las 05:00 del próximo lunes, por lo que el aislamiento continuará por tiempo indefinido con la nueva medida.
El anuncio, ofrecido anoche en cadena nacional de radio y televisión, responsabiliza a la indisciplina de la población por el rebrote, con 'el relajamiento en el cumplimiento del uso de mascarillas, el distanciamiento físico en el transporte público y en las filas para ingresar a los comercios', expresó una nota del Ministerio de Salud (Minsa).
La directora nacional de Salud, Nadja Porcell, quien dio lectura al comunicado, agregó que en el análisis de las causas se incluyó 'la alta movilidad de personas hacia el interior de la República, exponiéndose a la propagación del virus'.
Porcell señaló que aún existe la 'oportunidad de ganarle la batalla a la Covid-19', porque el sistema tiene capacidad, pero podría colapsar si continúa el incremento de casos de los últimos días, lo cual agotaría la disponibilidad de camas y respiradores artificiales, además del desgaste del recurso humano.
En contraposición, voces de la sociedad civil y representantes sindicales advirtieron previamente que podría sobrevenir un incremento por la forma en que el Gobierno abrió varias actividades económicas y la libre circulación durante la mayor parte del día; las autoridades rechazaron que esa sea la causa.
El incremento descontrolado del virus se inició desde la última semana de mayo, cuando los infectados sobrepasaron al peor momento de la pandemia desde el primer reporte el 9 de marzo pasado, pero la escalada más alta se produjo a partir del lunes pasado y hasta ayer cuando las cifras oficiales indicaron dos mil 986 pacientes.
Según el Minsa, las zonas que siguen con niveles preocupantes de contagio son el área metropolitana de esta ciudad, el populoso distrito capitalino de San Miguelito y las provincias Panamá Oeste y la central Veraguas, que en su conjunto acumulan el 80 por ciento de todos los contagiados durante la pandemia.
El reporte del Minsa del miércoles último, señaló que el 43 por ciento de los nuevos casos se localizaron en focos de esta urbe, en los corregimientos de Tocumen, Pacora, Belisario Porras, 24 de Diciembre y Curundú, los tres primeros cercanos entre ellos y ubicados en la periferia Este de la ciudad, mientras los dos últimos están dentro del casco urbano.
Otras céntricas barriadas citadinas con alto nivel de infectados son Calidonia, El Chorrillo y Santa Ana, mientras la contaminación se detuvo en las zonas donde se inició con fuerza la Covid-19 como el reparto San Francisco y otros.
El anuncio, ofrecido anoche en cadena nacional de radio y televisión, responsabiliza a la indisciplina de la población por el rebrote, con 'el relajamiento en el cumplimiento del uso de mascarillas, el distanciamiento físico en el transporte público y en las filas para ingresar a los comercios', expresó una nota del Ministerio de Salud (Minsa).
La directora nacional de Salud, Nadja Porcell, quien dio lectura al comunicado, agregó que en el análisis de las causas se incluyó 'la alta movilidad de personas hacia el interior de la República, exponiéndose a la propagación del virus'.
Porcell señaló que aún existe la 'oportunidad de ganarle la batalla a la Covid-19', porque el sistema tiene capacidad, pero podría colapsar si continúa el incremento de casos de los últimos días, lo cual agotaría la disponibilidad de camas y respiradores artificiales, además del desgaste del recurso humano.
En contraposición, voces de la sociedad civil y representantes sindicales advirtieron previamente que podría sobrevenir un incremento por la forma en que el Gobierno abrió varias actividades económicas y la libre circulación durante la mayor parte del día; las autoridades rechazaron que esa sea la causa.
El incremento descontrolado del virus se inició desde la última semana de mayo, cuando los infectados sobrepasaron al peor momento de la pandemia desde el primer reporte el 9 de marzo pasado, pero la escalada más alta se produjo a partir del lunes pasado y hasta ayer cuando las cifras oficiales indicaron dos mil 986 pacientes.
Según el Minsa, las zonas que siguen con niveles preocupantes de contagio son el área metropolitana de esta ciudad, el populoso distrito capitalino de San Miguelito y las provincias Panamá Oeste y la central Veraguas, que en su conjunto acumulan el 80 por ciento de todos los contagiados durante la pandemia.
El reporte del Minsa del miércoles último, señaló que el 43 por ciento de los nuevos casos se localizaron en focos de esta urbe, en los corregimientos de Tocumen, Pacora, Belisario Porras, 24 de Diciembre y Curundú, los tres primeros cercanos entre ellos y ubicados en la periferia Este de la ciudad, mientras los dos últimos están dentro del casco urbano.
Otras céntricas barriadas citadinas con alto nivel de infectados son Calidonia, El Chorrillo y Santa Ana, mientras la contaminación se detuvo en las zonas donde se inició con fuerza la Covid-19 como el reparto San Francisco y otros.
