Matanzas, 12 jul (RHC) El presidente de Cuba, Miguel Díaz–Canel, finalizó su visita gubernamental a la provincia de Matanzas, tras dos días de diálogo con dirigentes de empresas, entidades gubernamentales y culturales.

En una reunión sostenida en la sede del gobierno provincial, reconoció el esfuerzo del pueblo matancero y su entusiasmo por avanzar en cada tarea y materializar un abarcador programa socioeconómico, en ocasión del aniversario 325 de la fundación de San Carlos y San Severino de Matanzas.

También reafirmó el papel de la empresa estatal socialista y los requerimientos para lograr la eficiencia, y valoró de positiva la gestión de entidades como la del cítrico de Jagüey Grande, la agropecuaria Lenin y la empresa Suchel Jovel.

Además, se interesó por el programa de construcción de viviendas, teniendo en cuenta que en este territorio existen 37 entidades para la producción de materiales que podrían garantizar la edificación y reparación de unas 11 000 anuales.

Al abordar temas de la industria alimentaria, el jefe de Estado instó a revitalizar las producciones de lácteos, confituras, refrescos y otras líneas demandadas por la población.

En horas de la tarde, Díaz-Canel recorrió las obras de reparación del teatro Sauto y luego conoció la Estación de Bomberos, donde también radica un museo único de su tipo en el país, pues además de las piezas expuestas, funciona en activo el comando más antiguo de Cuba.

Visitó además el paseo peatonal Narváez, que bordea el río San Juan, donde conoció detalles sobre las obras reconstructivas que se ejecutan para lograr que cada recinto se convierta en un espacio cultural, que promueva el arte y los valores.

El mandatario también visitó la Central Termoeléctrica Antonio Guiteras, considerada el bloque más eficiente del sistema eléctrico del país; y la Empresa de Fertilizantes y Plaguicidas Rayonitro, la cual se dedica a la producción de fertilizantes mezclados, ácido sulfúrico y otras producciones químicas.

Como es habitual, durante el diálogo con el colectivo de trabajadores y directivos, el presidente cubano formuló muchas preguntas, indagó acerca del cumplimiento de las producciones, y se interesó por las condiciones laborales y la calidad de los productos.

A su paso por la ciudad Díaz-Canel saludó y conversó con los matanceros y estos le mostraron simpatía, afecto y respeto, de acuerdo con la prensa nacional.