Imagen / Cubadebate.
La Habana, 8 dic (RHC) El bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba, deja en 2020 cifras inéditas de daños como consecuencia del recrudecimiento de la hostil política en los últimos tiempos.
De acuerdo con recientes datos de la cancillería cubana, entre 2019 y 2020 Washington aplicó 17 medidas coercitivas para impedir que los estadounidenses y cubanos residentes en ese país vuelen a la nación caribeña.
La aplicación extraterritorial de ese mecanismo de coerción también se agravó en el último año pues la Oficina para el Control de Activos Extranjeros impuso 12 penalidades a entidades estadounidenses y de terceros países que superaron los dos mil 400 millones de dólares. También se iniciaron procesos legales al amparo de la Ley Helms-Burton por primera vez en 23 años.
Durante la presentación del informe sobre las afectaciones del bloqueo el canciller de nuestro país, Bruno Rodríguez Parrilla, informó que por primera vez en seis décadas la arbitraria política provoca pérdidas superiores a los cinco mil millones de dólares en un año.
A la isla se le niega el acceso a tecnologías médicas e insumos de Estados Unidos y terceros países con un componente de hasta el 10 por ciento proveniente del país norteño.
Para Rodríguez, esto hace que Cuba enfrente 'dificultades descomunales' a la hora de obtener equipamiento y materias primas para la producción de medicamentos contra el SARS-CoV-2.
En declaraciones a Prensa Latina, la investigadora del Centro de Estudios Hemisféricos y sobre Estados Unidos de la Universidad de la Habana, Dalia González, advirtió que muchas de las medidas coercitivas de Estados Unidos obedecían a una estrategia electoral.
Según la profesora, Donald Trump buscó con esto seducir los votos de la comunidad cubanoamericana de la Florida debido a su importancia como estado pendular.
Sin embargo, la política hostil de la Casa Blanca también perjudica a los estadounidenses por lo que numerosas voces de diferentes sectores se unieron este año al reclamo por el fin del cerco. (Fuente/Prensa Latina)
