La Habana, 28 abril (RHC)- Lizt Alfonso Dance Cuba prepara un nuevo espectáculo, Latido, que tendrá su estreno mundial del 13 al 28 de mayo en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso.
Del contraste enorme que existe entre la muerte, que puede ocurrir en cualquier momento, y la vida, que también aparece en un instante, nació Latido, resumió la coreógrafa y directora de la compañía Lizt Alfonso en un intercambio con la prensa para explicar el nuevo proyecto.
En 2013, una noche de jueves, Alfonso se encontró en la calle con un amigo querido y gran admirador de la compañía, conversaron sobre la vida, un día después él regresó a su país, México, y en la noche la llamaron para contarle que había fallecido.
Tenía mi edad y me impactó muchísimo porque me di cuenta de que uno deja de estar en cualquier momento, confesó la artista galardonada el pasado año por la Casa Blanca con el Premio International Spotlight para las Artes y las Humanidades.
Paralelamente, según contó, a las bailarinas principales de la compañía -Yadira, Diana, Claudia- le nacieron sus bebés y en el plano personal Alfonso dice que se convirtió en tía-abuela.
Aquel contraste entre vida y muerte le provocó Latido, una obra de una hora estimada de duración en la cual expresa sus emociones mediante el estilo fusión, aglutinador de elementos del flamenco, el ballet, la danza contemporánea, el folklore y disímiles bailes populares.
La compañía bailó la víspera para un grupo selecto de medios de prensa tres fragmentos del espectáculo que contará con el acompañamiento musical en vivo de la banda de uno de los principales exponentes del jazz latino a nivel mundial, el saxofonista local César López, Habana Ensemble, experto en combinar el jazz con los ritmos afrocubanos.
Su primer ballet tiene de eso pero también trasluce la formación clásica del saxofonista pues Alfonso le pidió un pasaje barroco, al estilo de Bach, y se le ocurrió crear una polifonía entre el violín y la flauta, y de ahí pasar al saxofón y la guitarra eléctrica.
Para López, Latido es la vida llevada a la música porque cuenta a grandes rasgos desde que el hombre nace hasta la muerte, narra momentos específicos del ser humano: la alegría, la ira, el amor, entre varios.
Tal vez, la danza académica tiene un peso mayor en el nuevo espectáculo pero la directora reconoce al ballet como la columna vertebral del entrenamiento de su compañía y escuela, que en 2017 celebran 25 años de fundadas.
El ballet es la forma limpia y delicada, llena de retórica y actualidad mediante la cual puedo expresar lo que siento, declaró Alfonso tras recordar su formación original en la danza clásica.
Como la propia inspiración de la obra, la coreografía parece llena de contrastes, una solista atraviesa la escena de manera lírica con pasos académicos mientras un joven cuerpo de baile conjuga bailes populares, elementos folclóricos y las técnicas profesionales de partneo.
Latido recorre un camino de emociones y, de acuerdo con la gestora, siempre es el momento de seguir adelante.
Vamos a luchar por el latido de la vida, y por aun después de muertos seguir latiendo en los corazones de los demás, invitó Alfonso en uno de los salones de ensayo de su sede, rodeada por la compañía.
(PL)
