Embajador de Francia en Cuba Patrice Paoli. Foto: Archivo.
La Habana, 16 may (RHC) El Mes de la Cultura Francesa en Cuba apuesta por el vínculo entre artistas e instituciones de ambos países y la confluencia de disciplinas como la danza, música, arte callejero, fotografía y teatro.
El evento, con actividades programadas desde el 3 de mayo último, incluye esta semana un concierto de Rémy Ballot y la Orquesta del Lyceum Mozartiano de La Habana, en el capitalino Oratorio San Felipe Neri y como continuidad de una relación similar entre el reconocido músico y la Orquesta Sinfónica Nacional.
En declaraciones a Prensa Latina, el embajador de Francia en la nación caribeña, Patrice Paoli, reconoció que las presentaciones actuales de Ballot resultan de las alianzas asumidas por el multipremiado director durante un viaje realizado en 2019 a la Isla.
El diplomático comunicó que el intercambio en el terreno musical es uno de los más significativos y mencionó entre los compositores seleccionados para la cita de este martes al pianista y profesor alemán Ludwig van Beethoven y al austriaco Wolfgang Amadeus Mozart.
De acuerdo con Paoli, otra de las propuestas es Cómala, una obra de danza contemporánea inspirada en el texto Pedro Páramo de Juan Rulfo, dirigida por el bailarín y coreógrafo franco-colombiano Alexi Marimón y en coordinación con la compañía de Rosario Cárdenas.
Previsto inicialmente en el teatro Martí, el espectáculo acontecerá en el teatro Miramar los días 20,21 y 22 de mayo, con la intervención de bailarines cubanos y colombianos que, según sus promotores, “traducen la belleza y fisicidad caribeña a través del movimiento”.
Entre los platos fuertes resalta también el Cabaret Literario, un espacio habitual organizado por la Alianza Francesa, que centrará sus debates en la obra El extranjero, de Albert Camus, y contará con una lectura bilingüe de fragmentos asumida por Alfredo Rodríguez Diago, Jandy Venta y Marc Sagaert.
Desde el Museo Nacional de Bellas Artes, Didier Ruiz propone una creación de La Compagnie des Hommes, con la participación de hombres y mujeres de la capital cubana, mayores de 75 años y que, sin ser actores profesionales, ayudan a la reflexión sobre la condición humana. (Fuente: Prensa Latina).
