Palmira, Siria, 5 may (PL) Miembros de la orquestra del Teatro Marynski, de San Petersburgo, obsequiaron hoy su virtuosismo musical en el anfiteatro romano de Palmira, en un concierto por la paz y la concordia en Siria.

Con el coliseo repleto de niños, jóvenes, representantes de la sociedad siria y embajadores de la Unesco, los músicos interpretaron piezas del repertorio antológico de clásicos como el ruso Serguei Prokófiev, y los universales Liudwing van Beethoven y Wolgfgan Amadeus Mozart, llenas de optimismo, al decir de unos de los laureados artistas.

Para sorpresa de todos los presentes el presidente ruso, Vladimir Putin, dirigió en vivo un mensaje por video conferencia en el que agradeció la acción humanitaria en favor de la paz y la reconciliación en Siria, desde un sitio, que aunque liberado de los terroristas, se encuentra muy cerca del teatro de operaciones combativas, subrayó Putin.

El mandatario expresó agradecimientos a quienes liberaron a Palmira, la ciudad histórica, patrimonio de la Humanidad y pidió un merecido homenaje a todas las victimas del terrorismo, pero resaltó la esperanza en la eliminación de "de esa epidemia de la faz de la tierra", con una victoria común.

La denominada perla del Oriente Medio y joya del desierto sirio fue recuperada a fines de marzo, luego de ser ocupada durante 10 meses por el Estado Islámico, y liberada tras una ofensiva del ejército siro con apoyo de la aviación rusa. Las fuerzas gubernamentales controlan un perímetro de unos 15 kilómetros alrededor de la ciudad, que sigue en el centro de un asedio por los grupos yihadistas y el Estado Islámico.

Mientras algunos reporteros redactábamos una nota durante la ruta de regreso hacia Latakia, se escuchó la voz de mando por uno de los transmisores de alerta por tiroteos a unos 30 kilómetros del sitio por donde transitaba la caravana de cinco ómnibus en total oscuridad. Los soldados que nos acompañaban tomaron los asientos delanteros con los fusiles y municiones. Todavía restaba un largo trecho de tensiones.