Panam Sports
La Habana, 23 ene (RHC).- Los Juegos Panamericanos de 2027 en Colombia están cada vez más lejos, pues se siguen conociendo circunstancias que no confirman lo contrario, lastimosamente.
Lo último que se supo es que el propio Neven Ilic, presidente de Panam Sports, le dio una orden estricta a Colombia con la que casi sentencia el futuro de las justas para el país.
OTRA DECISIÓN
«Ya no estamos hablando con Neven Ilic, sino con el comité ejecutivo de Panam Sports. Hablamos con el comité ejecutivo de la entidad y concluimos que le íbamos a enviar una carta a ellos para dar las explicaciones. Lo hicimos el 14 de enero», contó Ciro Solano, presidente del Comité Olímpico Colombiano (COC).
Y agregó: «Solicitamos una asamblea extraordinaria, porque fue la que ratificó la sede para Barranquilla. El comité ejecutivo no se va a echar para atrás, pues la carta es contundente. Si nos dan la oportunidad de convocarla es la última esperanza».
Una vez Panam Sports envió la carta, tomando la decisión de quitarle la sede a Colombia de manera indeclinable, el gobierno que encabeza el presidente Gustavo Petro determinó hacer una avanzada política en busca de recuperar la sede.
LA DETERMINACIÓN
El canciller Álvaro Leyva quedó comprometido con persuadir a los demás países para abogar por Colombia, pero eso no se pudo dar.
La idea no gustó en el seno de Panam Sports, que volvió a darle un portazo al país al solicitarle que el gobierno no tuviera injerencia en tratar de salvar las justas.
«Son reglas del olimpismo, no se acepta nada del gobierno. Neven Ilic nos indicó que no quería injerencias, pero lo que hizo el gobierno fue persuadir a los demás gobiernos. En ningún momento tuvo injerencias», señaló Solano.
«Ilic me dijo que no estaba de acuerdo con eso, por lo que yo hablé con el canciller para que pararan toda esa avanzada y así lo hicieron», contó Solano a Blu Radio.
Por el momento, se está a la espera de saber si habrá una asamblea extraordinaria de Panam Sports para que los dirigentes colombianos expongan las opciones que tienen para recuperar la sede de los Juegos.
Sin embargo, eso no significa que el presidente Gustavo Petro no se pueda ir a reunir con Ilic o con la gente de Panam Sports, en ningún momento es injerencia.
La Carta Olímpica dice claramente: «Los comités olímpicos nacionales (CON) deben preservar su autonomía y resistirse a todas las presiones, incluyendo pero no exclusivamente las presiones políticas, jurídicas, religiosas y económicas, que podrían impedirles ajustarse a la Carta Olímpica».
Y agrega: «Los gobiernos y demás autoridades públicas no nombrarán a ningún miembro de un CON. No obstante, los CON pueden decidir, a su discreción, elegir como miembro a representantes de dichas autoridades».
Está claro, en este caso no ejerce presión para ningún miembro, lo que hacía Colombia era simplemente acompañar en la búsqueda de persuadir la recuperación de la sede.
La pérdida de la sede generó, en pleno arranque del año, un escándalo político que tiene a la ministra del deporte, Astrid Bibiana Rodríguez, con una moción de censura sobre su cabeza. La misma crisis obligó al presidente Petro a ponerse al frente de las gestiones, hasta ahora infructuosas, para tratar de recuperar la plaza para Barranquilla.
La semana pasada, Asunción (Paraguay) y Lima (Perú) oficializaron su intención de organizar los Panamericanos de 2027, complicando aún más las posibilidades de la capital del Atlántico.
El país está pendiente del anunciado viaje del primer mandatario a Chile, donde espera contar con el apoyo de su homólogo Gabriel Boric para que interceda ante Panam Sports, cuyo presidente Neven Ilic también es chileno.
Diez días antes de que se venciera el plazo, el 19 de octubre de 2023, en plenos juegos de Chile, la ministra Rodríguez, el exalcalde de Barranquilla Jaime Pumarejo y el presidente del Comité Olímpico Colombiano, Ciro Solano, se reunieron con Panam Sports y solicitaron, y lograron, fijar nuevos plazos.
El 30 de diciembre pasado debían haberse pagado los primeros cuatro millones de dólares. El segundo monto adeudado se amortizaría el 30 de enero de 2024. En esa cita en Santiago, el gobierno del presidente Petro, a través de la ministra Rodríguez, ratificó su pleno compromiso con los Juegos.
Aunque –reitera Panam Sports en la carta– «se estableció claramente y por escrito que el no cumplimiento de este nuevo y final plazo significaría el inmediato retiro de la sede a la ciudad de Barranquilla», inexplicablemente el Ministerio del Deporte de Colombia no dispuso de los fondos para realizar el primer pago.
«Como es de su conocimiento, lo establecido en la prórroga firmada y acordada entre las partes tampoco fue cumplido», dice la carta dirigida a Petro.
Luego de revelada la carta, el presidente Petro reaccionó con ironía con un mensaje en su cuenta de la red social X. «Hasta donde sé el 30 de enero no ha llegado. Estamos a 21», escribió el mandatario haciendo referencia al segundo plazo pactado.
Tomado de El Tiempo