Judo

La Habana, 4 mar (JIT).- El quinto lugar de Iván Silva (90 kg) constituyó la mejor actuación cubana en el Grand Slam de Judo de Taskent 2024, que llegó a su fin esta jornada.

En su primera aparición salió victorioso en poco más de un minuto sobre el local Azizbek Avazmuradov, a quien fue decretado el hansoku-make por una técnica de aterrizaje con la cabeza prohibida en este deporte.

Esa misma receta fue aplicada al libanés Caramnob Sagaipov en apenas 13 segundos de combate, por lo que llegó a los cuartos de final con el mínimo esfuerzo.

Allí lo esperaba el ruso Mikhail Igolnikov, quien le arrancó dos shidos antes de mostrar un excelente repertorio con el cual le sacó dos veces waza-ari en menos de un minuto, para decretar el waza-ari-awasete-ippon. Primero una técnica de o-uchi-gari en que mostró fortaleza de piernas y luego atacó la cabeza del cubano con un movimiento de koshi-guruma que le dio la victoria.

Silva se redimió en el repechaje y sorprendió en menos de un minuto al rumano Alex Cret, con una excelente ejecución de ko-soto-gake que lo acostó literalmente sobre el tatami para conseguir el ippon.

Ello le dio la oportunidad de discutir la medalla de bronce frente al campeón mundial y medallista olímpico uzbeko Davlat Bobonov, quien le tenía preparada una emboscada y lo proyectó en apenas 15 segundos con un espectacular uchi-mata que el árbitro no dudó en decretar ippon.

Eso lo dejó sin posibilidad de subir al podio, mas el quinto lugar le consigue puntos valiosos para el ranking olímpico en que marcha en puestos de clasificación.

Andy Granda (+100 kg) no pudo con el japonés Hyoga Ota en su primera salida y cayó por hansoku-make luego de tres shidos en menos de tres minutos. No pudo revalidar la medalla de bronce conseguida en la anterior edición de este torneo en 2023. Ota finalmente se coronó campeón del evento.

De la misma forma cayó Idalys Ortiz (+78 kg) frente a la portuguesa Rochele Nunes, cuando el árbitro paró el combate a falta de seis segundos, lo que a muchos pareció en exceso riguroso, y aplicó un shido por pasividad a ambas que significaba el hansoku-make para la cubana por constituir el tercero señalado por la misma causa.

La multimedallista olímpica y mundial todavía conserva puestos de clasificación a París 2024, mas perdió una oportunidad de sumar en cuantía superior para mejorar su posición. 

El griego Theodoros Tselidis se alzó con el título en la división de 90 kg. También ganaron sus divisiones el uzbeko Muzaffarbek Turoboyev (100 kg), la japonesa Rika Takayama (78 kg) y la china Xin Su (+78 kg), además de Ota.

Francia retuvo el primer puesto por países con tres coronas. Le siguieron Japón y Uzbekistán, en ese orden, con dos. Cuba quedó en el puesto 25 entre las casi 70 naciones participantes.