El titular del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, culpó al expresidente de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) Lamine Diack de llevar al desastre a la entidad que dirigía.
Es realmente incomprensible que el presidente de una Federación internacional demande dinero de deportistas para manipular resultados de pruebas de dopaje, dijo Bach.
En una entrevista con la revista deportiva alemana Kicker, Bach dijo que el organismo rector del campo y pista mundial enfrenta actualmente "un camino difícil" en sus esfuerzos para limpiar el deporte.
No obstante, considera que su nuevo presidente, el exmediofondista Sebastian Coe, ha dado los pasos iniciales apropiados al ponerse en contacto con la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) y formar una comisión para iniciar reformas.
La IAAF se encuentra inmersa en un gran escándalo por acusaciones de encubrir dopaje y una profunda corrupción en el corazón de la organización.
Diack, que dejó la IAAF en agosto luego de 16 años, renunció en noviembre pasado a su membresía honoraria en el COI, un día después de ser suspendido provisionalmente por la junta ejecutiva de ese organismo.
Por otra parte, Bach reiteró que la política de "cero tolerancia" al dopaje por el COI significa que cada atleta, entrenador, médico o funcionario involucrado debe ser castigado, pero que "los atletas limpios deben ser protegidos".