Nueva York, 29 mar (RHC) Los precios del petróleo subieron  más de un dólar en Nueva York y Londres, alentados por un aumento de las reservas comerciales estadounidenses de crudo menor que el estimado previamente por analistas.

En el primero de esos mercados, el petróleo Intermedio de Texas despidió las operaciones en 49,51 dólares el barril, tras experimentar un alza de 1,14 dólares.

Mientras, en el de Londres el tonel de crudo Brent del mar del Norte progresó este miércoles 1,09 dólares y se negoció al cierre en 52,42 dólares.

Analistas atribuyeron también los repuntes de las cotizaciones de ambos tipos de combustible de referencia, a la inestabilidad existente en Libia -uno de los mayores productores de África-, donde recientes incidentes podrían provocar la merma del nivel de extracción en cerca de medio millones de barriles.

Luego de un notable incremento de los valores en enero y febrero como resultado de la aplicación de un acuerdo entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y unos 11 importantes productores de crudo externos a esa agrupación, las cotizaciones del hidrocarburo declinaron en ambos mercados un 13 por ciento de su valor en las últimas semanas.

Analistas asociaron ese repliegue a reiteradas noticias de un incremento de la producción estadounidense de petróleo no convencional y al fortalecimiento del dólar frente a otras divisas, gracias a factores especulativos.

También explicaron la fuerte y repentina reversión bajista en el importe del llamado oro negro, al hecho de que ese bloque de exportadores expresó en su último reporte mundial que, a pesar del acuerdo logrado de reducir o recortar la producción y con ello la oferta, los inventarios del combustible continúan en ascenso.

Independientemente de que esto último en definitiva termine poniendo en tela de juicio la sustentabilidad de dicho pacto, la OPEP y otros organismos coinciden en que la demanda de carburante seguirá en ascenso y con ello las cotizaciones de ese commodity.

A despecho de los pronósticos bajistas sobre los precios, emitidos por la firma Goldman Sachs -que con frecuencia se equivoca en sus predicciones-, basados en los nuevos proyectos de producción y el renovado auge del shale o petróleo de esquisto en Estados Unidos, los analistas coinciden en que las cotizaciones del petróleo podrían alcanzar los 60 dólares el barril a mediados de año.