La Habana, 17 dic (RHC) La economía cubana cerrará 2018 con un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) ligeramente superior al uno por ciento en medio de múltiples tensiones, la mayor de ellas el bloqueo de Estados Unidos.
La víspera, el ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil, confirmó en la Asamblea Nacional del Poder Popular la cifra y adelantó un pronóstico similar para 2019, apunta Prensa Latina.
En la Comisión de Asuntos Económicos del Parlamento, el funcionario explicó que el crecimiento del PIB quedó por debajo de lo planificado, alrededor del dos por ciento.
Sin embargo, llamó a analizar ese resultado en un contexto complejo, marcado por el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Washington durante casi seis décadas y el impacto de fenómenos climatológicos, como el huracán Irma en la segunda mitad de 2017 y las fuertes lluvias asociadas a la tormenta subtropical Alberto, a mediados de este año.
Recordó que la cifra de crecimiento proyectada para Cuba en 2018 está en sintonía con el avance del 1,3 por ciento estimado para la región por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
De acuerdo con Gil, el saldo favorable del PIB en 2018 respecto al año precedente y los pronósticos para 2019 constituyen ante todo un resultado importante, al demostrar el potencial de la economía para crecer ajustada a los recursos disponibles, sin incrementar el endeudamiento.
El presidente Miguel Díaz-Canel consideró meritorio el desempeño de la economía, pese a los números discretos y a no mejorar como se desea la vida de las personas.
En la propia comisión parlamentaria, instó a no pasar por alto el obstáculo que representa el bloqueo estadounidense y su reforzamiento por la administración que encabeza el presidente Donald Trump.
En particular Díaz-Canel comentó a los diputados la arista del cerco que tiene que ver con la persecución financiera contra Cuba.
Otros parlamentarios se refirieron a los daños del bloqueo en el sector del turismo, una de las áreas clave para el desarrollo de la mayor de las Antillas, lo que explica que este entre las más atacadas por las medidas de Trump.
Ante el tenso escenario en el cual se desenvuelve el país, el desarrollo solo es posible mediante la eficiencia y el control de los recursos, advirtió ayer Díaz-Canel.
El primer mandatario insistió en la importancia de la planificación realista y de su seguimiento, la lucha contra la burocracia y los dogmas, y el reforzamiento de la efectividad de las estructuras de dirección y gestión económica.
También abogó por la defensa de la producción nacional, el estímulo a la inversión extranjera, el impulso al desarrollo local y la integración de los diversos sectores, con el protagonismo de la empresa estatal.
Todo lo que pueda producirse en Cuba con calidad y eficiencia debe materializarse, subrayó.
Respecto a las inversiones, advirtió sobre la necesidad de mejorar los estudios de factibilidad, en aras de que rindan sin demora los resultados previstos en la planificación.
Díaz-Canel resaltó la importancia de que los factores de la economía trabajen integrados, con la empresa estatal como centro y su vinculación con la inversión extranjera, las empresas mixtas y otras formas de propiedad, entre ellas la privada. (Prensa Latina)