Moscú, 3 feb (RHC) Cuba se presenta como otro de los tesoros expuestos y por explorar en la feria rusa Buceo-2019, cuyas labores concluyen este domingo en el Centro de Exposiciones del capitalino parque Sokolniki.
De acuerdo con el consejero de Turismo de la embajada de la nación caribeña en ese país, Juan Escalona, la mayor isla de las Antillas cuenta con muchos puntos de buceo, suficientes como para que esa actividad se desarrolle con más fuerza y más ímpetu.
Agregó que se busca lograr inversiones en esa área y se han tenido conversaciones sobre el tema durante el encuentro, incluida la creación de nuevas escuelas y posibilidades de certificación del buceo en la mayor isla de las Antillas.
Ello buscaría mejorar las condiciones y contar con mejor equipamiento, además de tener más especialistas en Cuba que puedan dedicarse con fuerza al buceo como modalidad del turismo, afirmó.
Asimismo, añadió que hoy se desarrollan dos eventos importantes de buceo en la mayor isla de Las Antillas. Uno es Imasub, organizado por el grupo hotelero Gaviota en la playa María la Gorda, y otro a cargo del ministerio de Turismo en la zona de Cayo Largo.
Ambos eventos son dedicados a la fotografía subacuática y promueven el buceo contemplativo, aclaró.
En el archipiélago de Jardines de la Reina poseemos la mejor aérea submarina preservada de todo el Caribe. Ahí la empresa italiana Balon trabaja en la conservación de esa área, afirmó.
En la feria se nos acercaron personas e instituciones para ver si Cuba está interesada en explorar los fondos marinos y es algo que estimo podría interesarle al país, desde el punto de vista de la arqueología, opinó.
La Academia de Ciencias de Cuba podría tener interés en desarrollar una cooperación de ese tipo, consideró, aunque aclaró que eso requiere de muchos recursos.
Pero sería positivo si existe interés de la parte rusa de llevar a Cuba sus equipos subacuáticos, estimó.
La presencia de Cuba en la feria Buceo-2019, con participación de 265 exponentes de 22 países, ofrece una ventana caribeña, en medio de un crudo invierno, en el que solo mencionar el mar lleva a soñar a muchos de los rusos que visitan esta cita. (Fuente: PL)