La Habana, 7 oct (RHC) La Empresa de cultivos varios La Cuba, de la central provincia Ciego de Ávila, una de las entidades agropecuarias más eficientes en el país, sostiene encadenamiento productivo al elaborar tostones prefritos con la materia prima proveniente de sus campos, a pesar de la baja disponibilidad de combustible.
Brazzy Gómez, comercial de esa entidad, precisó que la cercanía de los sembrados de plátano burro les facilita utilizar la tracción animal para trasladar los racimos que luego lavan, pelan y cortan de forma manual en la minindustria de tostón (patacón) vaporizado, donde sobrecumplen las 10 toneladas y media del producto que está en plan cada mes.
En esa unidad laboran 18 trabajadores, la mayoría mujeres, que luego de someter las porciones del banano en proceso de cocción durante 24 minutos los aplastan y envasan en nailon de uno y dos kilogramos, precisó Gómez.
De acuerdo con el funcionario, este surtido se destina, fundamentalmente, al turismo de frontera para sustituir importaciones, pero también llega a la población a través de los mercados.
Explicó, además, que para contribuir al ahorro de los portadores energéticos, detienen los hornos, tecnología de punta, a partir de las once de la mañana hasta la una de la tarde.
La Cuba es la encargada de tributar importantes volúmenes del banano que se transforma en pulpa en las instalaciones de la Empresa Agroindustrial Ceballos y posteriormente es procesada y envasada en la fábrica La Estancia, perteneciente al Ministerio de la Industria Alimentaria, en la provincia de Sancti Spíritus.
Ubicada en el municipio de Baraguá, esta entidad dispone de seis modernas cámaras de maduración del plátano fruta, con capacidad para dos mil 500 cajas cada una, que permiten regular con mayor precisión parámetros como la temperatura, la humedad y garantizar otros requerimientos, en función de la calidad y presencia de las producciones del surco.
La inversión frigorífica ha sido esencial para Ciego de Ávila, pues más del 90 por ciento de esa fruta que se cosecha en los campos avileños de La Cuba se destina a las instalaciones turísticas del país, con excepción de Guantánamo.
Contar con esa tecnología representa un gran paso de avance desde el punto de vista económico y social, pues los equipos sirven, además, para proteger los granos, papas y otros productos.
En la visita a la provincia del presidente cubano Miguel Díaz-Canel en septiembre último, Carlos Blanco Sánchez, director de La Cuba, señaló que a pesar de la limitante de combustible están en condiciones de cumplir su encargo estatal y el compromiso con las 254 instalaciones hoteleras en todo el territorio nacional. (Fuente: ACN).