La Habana, 16 feb (RHC) La elaboración en Cuba de productos de construcción con altas tecnologías y materias primas naturales forma parte de la estrategia del país para sustituir importaciones en ese sector.
Con ese propósito, el Ministerio de la Construcción (MICONS) implementa alianzas con entidades estatales y formas de gestión no estatal, como BLS-Parrot, que en 2020 contribuyó al ahorro de unos cinco millones de dólares por concepto de sustitución de importaciones.
Así lo informó el arquitecto Manuel Benítez Pérez, investigador y desarrollador de tecnologías modernas aplicadas a la construcción, quien dirige BLS-Parrot.
Para el presente año, agregó, se estima que sus producciones aumentarán la cifra de ahorro al país por diez millones de dólares.
Integrado por profesionales con experiencia en el campo de los acabados para sistemas constructivos, BLS-Parrot ha desarrollado procedimientos y métodos para la concepción, desarrollo y utilización de tecnologías, y equipos diseñados para su puesta en práctica.
Refiere Granma que a partir del respaldo del MICONS, el Grupo Empresarial de la Industria Química (GEIQ) y el Ministerio de Economía y Planificación, se han desarrollado bases, resinas y productos de amplia demanda.
En cumplimiento con los lineamientos del país, también se planifican las primeras operaciones para la exportación.
Uno de los materiales desarrollados en BLS-Parrot es un mortero especial elaborado con productos cubanos, para la construcción de una vivienda en 24 horas por la vía de la impresión 3D.
Esta técnica, señala Benítez Pérez, no usa el cemento Portland y se está implementando solo en países altamente desarrollados.
De igual forma, realizan una variedad de resinas que constituyen la base para hacer todo tipo de acabados de construcción (pinturas, estucos, monocapas, inhibidores de óxido o esmaltes), así como adhesivos para el papel y el cartón y aglomerantes para briquetas, todo lo cual en su mayoría hoy se importa.
Indica el diario que su capacidad productiva ronda las 30 toneladas diarias, y se distinguen por tener elaboraciones ciento por ciento ecológicas, sin el uso de cemento Portland, ni aditivos derivados del petróleo.
Entre los clientes de BLS-Parrot se encuentran fábricas, fundamentalmente estatales, como las empresas Geomineras y de Gases Industriales, las industrias locales y las de producción de materiales de la construcción en todo el país.
Además, están desarrollando la primera carta cubana de colores, de conjunto con el MICONS y el Centro de Investigación y Desarrollo de la Construcción (CIDC), enfocados en la producción de pigmentos de colores a base de piedras naturales nacionales.
Este proceso también contribuirá a la sustitución de importaciones, pues la mayoría de los pigmentos en Cuba se compran en el exterior.
Todos estos proyectos pudieran considerarse dentro de la gama de rubros exportables y contemplan otras aristas encaminadas a la necesario construcción de viviendas en el país, concluye Granma. (Fuente: ACN).