Los alimentos que no se consumen suponen un desperdicio de recursos como la tierra, el agua, la energía, el suelo, las semillas y otros insumos utilizados para su producción.

Naciones Unidas, 29 sep (Prensa Latina) El secretario general de la ONU, António Guterres, alertó hoy que el 17 por ciento de los alimentos producidos a nivel mundial se desperdician, lo cual tiene un impacto desastroso en el planeta.

En tanto, el 14 por ciento de esos alimentos se pierde y urge reducir cuanto antes tales niveles desechos, apuntó por medio de su cuenta en Twitter con motivo del Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos.

Todos tenemos un papel importante que desempeñar en la reducción de estos residuos, recalcó el máximo representante de la ONU.

Por su parte, el director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Qu Dongyu, subrayó que los desperdicios de comidas en hogares, restaurantes y otros servicios equivalen a una pérdida de 400 mil millones de dólares al año en valor alimentario.

En un videomensaje destacó la necesidad de intensificar la cooperación global para transformar los sistemas alimentarios y mejorar la conexión de la granja a la mesa, en línea con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

De hecho, el ODS número 12 se refiere a garantizar patrones de producción y consumo sostenibles, e incluye una meta específica sobre reducir a la mitad el desperdicio de alimentos per cápita a nivel mundial para 2030.

La directora adjunta de Desarrollo Económico y Social de la FAO, Nancy Aburto, explicó que el problema del desperdicio de alimentos es mundial y que no se limita solo a las naciones ricas.

Según aseveró, la inseguridad alimentaria, el hambre y la desnutrición afectan a todos los países del mundo, ninguno está exento.

Actualmente, informó, unos 811 millones de personas sufren hambre en todo el orbe y dos mil millones tienen deficiencias de micronutrientes, es decir, deficiencias de vitaminas y minerales.

Millones de niños padecen retraso del crecimiento y emaciación, formas mortales de desnutrición, lamentó.

Aburto señaló que, debido a su alto costo, las dietas saludables están fuera del alcance de la gran mayoría de las personas de todas las regiones del orbe, incluida Europa.

Los reportes de la FAO también subrayan que los alimentos que no se consumen suponen un desperdicio de recursos como la tierra, el agua, la energía, el suelo, las semillas y otros insumos utilizados para su producción

Hace solo unos días, la ONU acogió la Cumbre sobre sistemas alimentarios, que permitió debatir muchas de estas cuestiones y convocó a tomar acciones urgentes al respecto. (Fuente:PL)