Beirut, 2 ago (RHC) La retirada de Kuwait de la delegación gubernamental de Yemen avivó el escepticismo sobre el éxito de las negociaciones de paz con los rebeldes, a pesar de haber aceptado una propuesta de acuerdo de la ONU.
Para la mayoría de analistas que dan seguimiento a la crisis en el país de la península Arábiga sobran evidencias para creer previsible el colapso de las conversaciones iniciadas el 21 de abril último en la capital kuwaití bajo el auspicio del enviado especial de la ONU para Yemen, Ismail Ould Cheikh Ahmed.
Sin embargo, los maratónicos esfuerzos emprendidos por el país anfitrión y el diplomático mauritano este fin de semana en aras de salvar las tratativas aliviaron parcialmente los temores, sin perder de vista la persistencia de combates sobre el terreno y los abismos que separan a los negociadores.
El viceprimer ministro y canciller yemenita, Abdelmalak Al-Mekhlafi, quien preside la comitiva que representa al gobierno del presidente Abd Rabbo Mansour Hadi, aseguró que las negociaciones "no estaban suspendidas ni finalizadas" y concluirán en la nueva fecha prevista del 7 de agosto próximo.