Lima, 5 ago (RHC) La primera protesta social bajo el nuevo gobierno neoliberal de Pedro Pablo Kuczynski se encaminó por el camino de diálogo en la región surandina de Cusco, tras un paro de protesta que se desarrolló sin incidentes de consideración.
El Frente de Defensa de los Intereses de la Provincia cusqueña de Urubamba advirtió tras culminar el paro de 48 horas y proclamar su éxito que tomará las cercanas ruinas de Machu Picchu si sus reclamos no son atendidos.
El paro tuvo carácter preventivo y obstaculizó el traslado de turistas desde la ciudad de Cusco hasta la estación del tren que lleva al santuario inca de piedra de Machu Picchu -el mayor atractivo turístico peruano- al bloquear la carretera entre ambos puntos.
La protesta exige la anulación de un fuerte aumento en las tarifas de energía eléctrica y la reversión al municipio lugareño de un terreno cercano al Río Sagrado, el Urubamba, por la empresa hotelera Libertador, que niega la usurpación perpetrada por una concesión ilegalmente otorgada para la construcción de un hotel.