La Habana, 25 agosto (RHC)- Cerca de un millón y medio de niños se han visto obligados a abandonar sus hogares por la violencia que genera el grupo yihadista nigeriano Boko Haram en los países de la cuenca del lago Chad.
Según la UNICEF, Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, otro millón de menores se encuentran atrapados en zonas de difícil acceso.
En un informe titulado “Niños en movimiento, niños dejados atrás”, el organismo de la ONU denuncia que el terrorismo de Boko Haram está teniendo un efecto especialmente devastador sobre la población infantil de Nigeria, Camerún, Chad y Níger.
Lamenta asimismo que 38 niños han sido utilizados para llevar a cabo ataques suicidas en la cuenca del lago Chad en lo que va de año, cifra que eleva a 86 el número total de menores forzados con el mismo fin desde 2014.
