Moscú, 14 nov (RHC/PL) Rusia denunció otro uso de sustancias tóxicas por grupos terroristas en la zona oriental de la ciudad siria de Alepo y reiteró su llamada a la Organización de Prohibición de Armas Químicas a enviar allí especialistas.
Los grupos extremistas causaron ayer intoxicaciones a 30 miembros del batallón 415 de la división 114 de la Guardia Republicana siria, en su mayoría ya hospitalizados, indicó el vocero del ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov.
El envenenamiento con sustancias prohibidas se produjo, tras la detonación de proyectiles de mortero o de bombas preparadas a partir de balones de gas, lanzadas desde las llamadas máquinas del infierno en el barrio de Karim-Jazmati, subrayó.
Los especialistas de defensa de armas químicas del citado ministerio recogieron muestras de los artefactos dinamiteros y confirmaron el hallazgo de cloro, cuyo empleo está prohibido desde 1993 por la Convención de Prohibición de Armas Químicas.
En Alepo, apuntó, los terroristas apelan cada vez y con más intensidad al uso de sustancias tóxicas como armas químicas contra los militares y los civiles. Los químicos prohibidos los esconden en túneles, según mostró la televisión capitalina.
Por otro lado, ni en Washington ni en Londres u otras capitales occidentales ningún político se refiere o denuncia los crímenes cometidos por los terroristas en Alepo. Más bien acusan al ejército sirio, indicó el mayor-general ruso.
Konashenkov reiteró esta jornada el pedido realizado la semana pasada a la OPAQ para que envíe lo más rápido posible a esa zona una misión de expertos con el fin de trabajar con especialistas militares rusos. En la parte oriental de Alepo se atrincheran unos seis mil miembros de diferentes grupos armados, casi todos subordinados al Jabhad Fatah As Sham, antiguo An Nusra, filial en Siria de la red Al Qaeda.
Los militares del Centro ruso de Reconciliación para las partes enfrentadas en Siria hallaron la semana pasada pruebas del empleo por los terroristas de armas químicas.
Mientras representantes sirios y del Programa de Fomento de Naciones Unidas (UNDP), analizaron en las vías para fortalecer la colaboración en la ayuda a desplazados y otros aspectos ante la guerra impuesta a este país.
Sobre esos temas trató una reunión entre el ministro sirio de Administración Local y Medio Ambiente, Hussein Makhlouf con el jefe residente del UNDP en la capital siria, Ali Zaatari.
En ese sentido, el Ministro explicó a Zaatari las condiciones creadas por el Comité Nacional de Socorro a las organizaciones e instituciones inetrnacionales para hacer llegar asistencias a los necesitados en todo el territorio.
Makhlouf abordó las vías para ampliar esa colaboración en la rehabilitación de la infraestructura del sector educacional, las redes sanitarias, energía elécrica y carreteras y no solamente en la ayuda humanitaria.
Por su parte, Zaatari dijo que se elevará el nivel de trabajo entre las dos partes con la implementación de proyectos para los aspectos planteados, así como mantener y ampliar la asistencia a desplazados y demás sectores sociales.