La Paz, 16 dic (RHC-PL) El presidente Evo Morales afirmó que será antiimperialista hasta su muerte porque Estados Unidos pretendió acabar con Bolivia desde 1959 y repartir su territorio entre los países vecinos.
Durante un acto en el cual informó sobre la existencia de documentos que confirman ese objetivo del gobierno norteamericano bajo el pretexto de la no solución a la situación política y económica de entonces, el primer mandatario declaró que después de la II Guerra Mundial, Estados Unidos desplegó un nuevo tipo de intervencionismo a través de la asistencia técnica y económica, del cual Bolivia fue un experimento.
Textos del Departamento norteamericano de Estado, filtrados por WikiLeaks, afirman que la nación andino-amazónica fue elegida como conejillo de indias de ese tipo de injerencia, declaró el jefe de Estado.
Al hablar en un acto de egreso de oficiales de la Escuela Antiimperialista en Santa Cruz, aseguró el gobernante que la Casa Blanca no ejerce la diplomacia, sino impone una política de conspiración contra los países para adueñarse de los recursos naturales y destruir la democracia y soberanía de los Estados.
En 2008 el Gobierno boliviano expulsó al embajador de Washington en La Paz, Philip Goldberg, por injerencia en los asuntos internos.