Bogotá, 26 ene (RHC) El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, agradeció a Cuba, a Noruega y al Comité Internacional de la Cruz Roja por su contribución al proceso de diálogos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo.
Aseguró Santos que sin ese respaldo no hubiera sido posible tal resultado para poner fin al largo conflicto entre ambas partes.
El primer mandatario de la nación suramericana elogió la calidad de los diplomáticos de nuestra isla al servicio de esa causa, durante casi 4 años. Cuba fue el anfitrión de las citas y desplegó toda una logística de aseguramiento, nuestro agradecimiento es eterno, añadió el gobernante.
Durante un acto el jefe de estado condecoró con la Orden de San Carlos en el grado de Gran Cruz a Rodolfo Benítez, máximo representante de los garantes cubanos, a Dag Nylander de Noruega y al Comité Internacional de la Cruz Roja.
Juan Manuel Santos resaltó el apoyo de esas delegaciones en todas las gestiones desde la etapa secreta hasta la firma de la paz con la guerrilla y en los operativos desplegados para trasladar a los miembros de las insurgentes fuerzas con la debida confianza y seguridad.
Por su parte, el líder de las FARC-EP, Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo, Timoleón Jiménez, calificó de campañas sucias los recientes señalamientos en torno a demoras de esa guerrilla, en fase de desmovilización para entregar a los menores que permanecen en sus filas.
Al respecto, declaró el comandante de las FARC-EP, Pastor Alape que en los campamentos de esa agrupación queda una veintena de jóvenes con edad inferior a los 18 años y adelantó que en fecha próxima abandonarían los mismos en correspondencia al pacto rubricado con el gobierno colombiano.
Sin embargo, denunció el tratamiento dado al primer grupo desmovilizado de las estructuras de esa organización rebelde el cual ha visto limitada su comunicación con los familiares cercanos y expresó que los menores que permanecen en los campamentos temen por su futuro luego de abandonar la guerrilla.
El acuerdo firmado entre los representantes gubernamentales y de las FARC-EP en Cuba, prevé beneficiar a los jóvenes con programas de reinserción en la vida comunitaria y familiar como parte de un plan de acogida más abarcador el cual incluye acceso a la educación y servicios de salud.