Washington, 9 mar (RHC) La representante demócrata por el estado norteamericano de Wisconsin, Gwen Moore presenta ante el Congreso una propuesta de ley que busca impedir el uso de fondos federales para pagar el muro en la frontera con México.
Gwen Moore expresó su desacuerdo con la construcción del muro y manifestó que la promesa de campaña del presidente Donald Trump no debería ser una carga para los contribuyentes estadounidenses en caso de ejecutarse la obra.
La presentación del proyecto de ley se produce poco después de que el diario The Washinton Post revelara que la Casa Blanca considera un plan para reducir los fondos de la Guardia Costera, la Administración de Seguridad del Transporte y la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias.
Los recortes estarían encaminados a financiar la barrera en la frontera, los centros de detención para inmigrantes y la contratación de agentes migratorios.
Por su parte, el presidente de Francia, Francois Hollande, pidió prudencia a la compañía franco-suiza LafargeHolcim, que se declaró dispuesta a colaborar en la construcción del muro fronterizo planeado por el presidente estadounidense, Donald Trump, en la frontera con México.
En declaraciones ofrecidas desde Bruselas, donde participa en un Consejo Europeo, el mandatario estimó que "hay mercados en los cuales hay que ser prudentes antes de anunciar una candidatura".
El grupo especializado en materiales de construcción anunció ayer su postura favorable a colaborar con todos los proyectos que Estados Unidos demande, al alegar que "no somos una organización política" y "nuestra misión es satisfacer las necesidades de los clientes".
La cuestión provocó varias reacciones en Francia, como la del ministro de Asuntos Exteriores, Jean-Marc Ayrault, quien llamó a la empresa a reflexionar bien antes de participar en el proyecto.
En declaraciones a la cadena de noticias France Info, Ayrault sostuvo que LafargeHolcim debe "reflexionar bien" antes de tomar esa decisión, y recordó que las empresas también tienen una "responsabilidad económica, social y medioambiental".
El ministro instó a la compañía a pensar en sus propios intereses económicos, al enfatizar que una implicación en el polémico proyecto de Trump no sería bien vista por otros clientes en el resto del mundo.
Ayrault expresó su condena a los métodos usados por el nuevo presidente estadounidense, quien defiende abiertamente una férrea política anti-inmigrantes y pretende construir el muro para evitar el ingreso clandestino de personas procedentes de México y otros países latinoamericanos.
