Kuwait, 21 abr (RHC) Los gobiernos de Kuwait y de otros países árabes e islámicos de Medio Oriente condenaron este 21 de abril, el ataque terrorista en los Campos Elíseos, París, acción en la que perdió la vida un policía.
El emir kuwaití, jeque Sabah Al-Ahmed Al-Jaber Al-Sabah, envió un mensaje al presidente de Francia, Francois Hollande, en el que lamenta el fallecimiento del agente del orden, y deseó pronta recuperación a los otros dos efectivos heridos por disparos de un extremista la noche del jueves.
Refiere la información de la agencia Prensa Latina (PL) que Al-Sabah calificó el ataque de “acto cobarde” ajeno al Islam y todas las religiones y creencias del planeta, criterio compartido en otros mensajes por el príncipe heredero y el primer ministro kuwaitíes, jeques Nawaf Al-Ahmed Al-Jaber Al-Sabah y Jaber Al-Mubarak Al-Hamad Al-Sabah, respectivamente.
Por su parte, el presidente de la Asamblea Nacional, Marzouq Alí al-Ghanim, envió condolencias a su homólogo galo, Claude Partolone. En las mismas manifiesta la necesidad de una cooperación internacional política, cultural y de seguridad para enfrentar el fenómeno del terrorismo.
En tanto, las cancillerías de Bahrein, Qatar y Arabia Saudita se pronunciaron en duros términos contra la agresión en los Campos Elíseos, reivindicada por el Estado Islámico.
El reino bahreiní advirtió igualmente que el ataque es “un acto criminal contrario a los principios de todas las religiones y representa una amenaza a todos los valores humanos y morales”.
Las autoridades qataríes y sauditas, entretanto, se solidarizaron con las víctimas y el gobierno francés, y mostraron su rechazo a cualquier forma de violencia y extremismo.
Mientras, el gobierno libanés deploró el hecho en vísperas de las elecciones presidenciales en el país europeo, y pidió unificar acciones internacionales para acabar con el fenómeno del terrorismo, sus autores, colaboradores y fuentes de financiamiento.
En Teherán, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Bahram Qassemi, lamentó que “persista el estímulo a más operaciones de terror en el corazón de Europa debido al apaciguamiento y apoyo recibido por los terroristas a causa del doble rasero de Occidente” en abordar ese flagelo.