Quito, 13 jun (RHC) La canciller de Ecuador, María Fernanda Espinosa, abogó por potenciar los nexos comerciales con otras naciones y ser pragmáticos con las economías complementarias a la del país sudamericano.
En Quito María Fernanda Espinosa consideró que en la nación ecuatoriana no hay devaluaciones, existe estabilidad política y una de las mejores infraestructuras de América Latina como resultado de los 10 años de Revolución ciudadana liderados por el expresidente Rafael Correa.
Al referirse al tema comercial la titular también destacó la importancia de aprovechar el Acuerdo Multipartes en vigencia con la Unión Europea, a través del cual las exportaciones hacia ese importante mercado crecieron sustancialmente.
Por otra parte la canciller ecuatoriana adelantó que hay avances hacia la concreción de convenios de intercambio con estados centroamericanos y reiteró que se Ministerio trabajará por impulsar y robustecer las relaciones a nivel mundial.
Igualmente la primera dama de Ecuador, Rocío González de Moreno, demandó hoy en las Naciones Unidas la plena inclusión y el respeto a los derechos de los discapacitados.
Al intervenir aquí en un foro de seguimiento a la Convención sobre los Derechos de las Personas Discapacitadas, González llamó a implementar ese instrumento internacional, que entró en vigor en 2008, como un paso clave para cumplir el principio de No dejar a nadie atrás, que acompaña la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible.
El mundo será más justo, más equitativo y más libre si se aplica en toda su dimensión en el planeta la Convención, afirmó la encargada en Ecuador del Comité Interinstitucional del Plan Toda una Vida, iniciativa dirigida a un bienestar humano sin exclusiones.
La delegada insistió en que la inclusión no constituye una metodología, y debe convertirse en una forma de ser, pensar y actuar.
González aprovechó su intervención para reiterar el compromiso de Ecuador y de su recién electo presidente, Lenín Moreno, con el empoderamiento de los seres humanos con limitaciones físicas, mentales, intelectuales o sensoriales.
En ese sentido, destacó los esfuerzos de la última década, entre ellos la Misión Manuela Espejo, la cual calificó de una cruzada para hacer visibles a los discapacitados y atenderlos como se merecen.
“Hoy, después de haber recorrido un largo camino, con orgullo podemos decir que Ecuador se ha convertido en un país donde celebramos la diversidad y donde prevalecen los valores de la solidaridad, la generosidad y la empatía”, subrayó.