México, 16 sep (RHC-PL) Los padres de los 43 estudiantes desaparecidos de la normal rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, estado mexicano de Guerrero, continúan exigiendo al gobierno justicia ante un dilatado proceso de casi tres años que se cumplira el próximo día 26.
La víspera, en el marco del día de la independencia, en los municipios de Tixtla y Chilpancingo, desarrollaron una jornada denominada el 'antigrito', en denuncia a las autoridades nacionales que tratan de ocultar la realidad de los hechos.
Entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014, los 43 alumnos desaparecieron en Iguala. Miembros de la policía entregaron a los jóvenes al grupo delictivo Guerreros Unidos.
En Chilpancingo el antigrito se realizó en el teatro Francisco Granados Maldonado como un acto contrario al oficial que era de festividad, en el Palacio de Gobierno de la localidad.
Mientras en el municipio de Tixtla, otro grupo marchó hasta la explanada del zócalo Ignacio Manuel Altamirano, en donde realizaron un mitin de protesta.
Miguel Ángel Mendoza, padre de uno de los jóvenes, dijo que llevan tres años de angustia, sin solución a sus demandas, porque, denunció, a las autoridades no les interesa decirnos qué pasó con nuestros hijos.
Para los especialistas y organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales esa tragedia marcó al gobierno de Enrique Peña Nieto, quien siguen sin darle solución y entregar vivos o los cuerpos de los estudiantes a sus padres.