Lima, 15 dic (RHC) El presidente peruano, Pedro Pablo Kuczynski, se negó a renunciar pese a graves acusaciones de posible corrupción, aunque corre el riesgo de ser destituido por al parlamento.
En un mensaje transmitido al filo de la medianoche por televisión, el primer mandatario rechazó tácitamente el emplazamiento a dimitir que le hizo la bancada del partido derechista Fuerza Popular (FP) horas antes, bajo tácita amenaza de vacarlo (destituirlo) si no lo hiciera, destaca Prensa Latina.
'No voy a abdicar ni a mi honor ni a mis valores ni a mis responsabilidades como presidente de todos los peruanos', dijo el gobernante, acompañado de su gabinete ministerial y de los miembros de su bancada parlamentaria.
Kuczynski se pronunció en esos términos al dar su versión sobre la revelación de que una empresa de su propiedad y otra a la que se le vincula, cobraron cerca de cinco millones de dólares por servicios a la empresa brasileña Odebrecht.
Señaló que esa información, proporcionada por Odebrecht a una comisión parlamentaria investigadora y difundida ayer por esta, fue presentada como si se tratara de honorarios por servicios prestados por él a la firma brasileña. Eso es falso, expresó.
También negó de maner tajante que hubiera recibido a través de la empresa First Capital más de cuatro millones de dólares, y presentó documentos que muestran que quien firmó los contratos de servicios por ese monto es Gerardo Sepúlveda, dueño de esa empresa, de la que no es socio ni ejecutivo.
Añadió sin embargo que solo hizo una de esas consultorías, de carácter financiero, a través de First Capital, para un proyecto manejado por Odebrecht, lo que admtió el sábado último.
Sobre los 780 mil dólares cobrados a la compañía brasileña por Westfield, empresa de su propiedad, Kuczynski alegó que nunca estuvo a cargo de la gestión ni de la administración de la misma mientras ha sido funcionario público.
Añadió que para demostrar su honestidad ante la comisión investigadora de los sobornos brasileños y ante el Ministerio Público pedirá a este el levantamiento de su secreto bancario para que revisen sus cuentas.
Las primeras reacciones de parlamentarios de diversas tendencias ante las explicaciones de Kuczynski fueron de incredulidad, lo que deja abierta la posibilidad de que el parlamento, en una sesión convocada para hoy, ponga en marcha el procedimiento de vacancia para defenestrar al mandatario.