Bogotá, 18 feb (RHC-PL) La Agencia para los Refugiados y la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos advirtieron sobre el desplazamiento de más de 800 campesinos e indígenas en el noroeste de Colombia.
A través de un comunicado conjunto, ambas instancias de Naciones Unidas denunciaron en particular el creciente desplazamiento forzado en el último mes en áreas rurales de la región del Bajo Cauca, situada en el departamento de Antioquia.
Tal situación fue explicada por el 'alarmante incremento en el número de homicidios en el Bajo Cauca', pese al llamado de atención realizado por la Defensoría del Pueblo a fines del pasado mes de enero.
Las medidas adoptadas para la protección de la población han sido insuficientes, estimó la ONU, tras instar al Estado a una respuesta más integral para enfrentar la violencia en esa zona del país.
Más de 7,4 millones de personas en Colombia han sido víctimas de desplazamiento forzado, mayormente campesinos, indígenas, afrocolombianos, mujeres y niños.
