Puerto Príncipe, 12 jul (RHC) La Federación de Alcaldes de Haití (Fenamh) también exige la renuncia del primer ministro Jack Guy Lafontant.
A través de un comunicado la Fenamh expresó solidaridad con los familiares de las víctimas y su preocupación por el futuro de quienes perdieron empleos, tras el saqueo y la quema de varias empresas y centros comerciales durante las manifestaciones que tuvieron lugar el pasado fin de semana por la fallida alza del combustible.
La Federación también reconoció que la reacción de la población es el resultado de una falta de consulta en la toma de decisiones del gobierno, pero especialmente las frustraciones nacidas de la insatisfacción por los diferentes componentes sociales del país, sobre todo los más desfavorecidos, agrega la nota.
De igual manera, exigió 'la dimisión del primer ministro, la formación de un gobierno abierto con una hoja de ruta clara incluyendo las preocupaciones reales de la población', señala la nota.
Con esta postura, la Fenamh se une al número cada vez más creciente de sectores e instituciones que solicitan al presidente, Jovenel Moise, una renovación del gobierno, y en especial la dimisión de su primer ministro Jack Guy Lafontant.
En días previos, la solicitud fue realizada por Foro Económico del Sector Privado, los parlamentarios de ambas cámaras, organizaciones de derechos humanos, el Colectivo 4 de diciembre, la Federación Protestante Haití y la Conferencia Episcopal.
Las peticiones de renuncia se acrecentaron tras los violentos disturbios del fin de semana que dejaron al menos tres muertos; así como decenas de heridos y la destrucción de hoteles, establecimientos comerciales, negocios privados e instituciones del Estado.
Las protestas se desataron por el anuncio del alza de las tarifas de los carburantes entre un 38 y un 51 por ciento, medida que responde a uno de los acuerdos de las autoridades haitianas con el Fondo Monetario Internacional, con el alegado objetivo de disminuir el déficit público y reducir la pobreza.
Sin embargo, para la opinión pública y de especialistas, el incremento sumiría más en la escasez y la precariedad a la población haitiana, cuya mayoría vive con menos de dos dólares diarios.
La Federación también reconoció que la reacción de la población es el resultado de una falta de consulta en la toma de decisiones del gobierno, pero especialmente las frustraciones nacidas de la insatisfacción por los diferentes componentes sociales del país, sobre todo los más desfavorecidos, agrega la nota.
De igual manera, exigió 'la dimisión del primer ministro, la formación de un gobierno abierto con una hoja de ruta clara incluyendo las preocupaciones reales de la población', señala la nota.
Con esta postura, la Fenamh se une al número cada vez más creciente de sectores e instituciones que solicitan al presidente, Jovenel Moise, una renovación del gobierno, y en especial la dimisión de su primer ministro Jack Guy Lafontant.
En días previos, la solicitud fue realizada por Foro Económico del Sector Privado, los parlamentarios de ambas cámaras, organizaciones de derechos humanos, el Colectivo 4 de diciembre, la Federación Protestante Haití y la Conferencia Episcopal.
Las peticiones de renuncia se acrecentaron tras los violentos disturbios del fin de semana que dejaron al menos tres muertos; así como decenas de heridos y la destrucción de hoteles, establecimientos comerciales, negocios privados e instituciones del Estado.
Las protestas se desataron por el anuncio del alza de las tarifas de los carburantes entre un 38 y un 51 por ciento, medida que responde a uno de los acuerdos de las autoridades haitianas con el Fondo Monetario Internacional, con el alegado objetivo de disminuir el déficit público y reducir la pobreza.
Sin embargo, para la opinión pública y de especialistas, el incremento sumiría más en la escasez y la precariedad a la población haitiana, cuya mayoría vive con menos de dos dólares diarios.