Damasco, 30 sep (RHC) Amplia repercusión tiene en Siria la intervención del vicepresidente y canciller de ese país, Walid Al-Moalem, en el 73 período de sesiones de la ONU, quien afirmó que están decididos a depurar todo su territorio de la lacra del terrorismo y de cualquier presencia extranjera ilegítima.
Destacó Al Moalem en sus palabras que la situación sobre el terreno en Siria es ya más segura y estable, puesto que la batalla contra el terrorismo está a punto de terminar y se trabaja paralelamente en la reconstrucción y el regreso de los desplazados.
Subrayó además que, siempre que acuden a ese foro internacional traen esperanzas y deseos de paz y estabilidad para cada rincón del mundo, y precisó que hoy se aferran más que nunca a ese anhelo y confían en que la voluntad de los pueblos triunfará.
Igualmente se informó que el Ejército sirio rechazó ataques terroristas en la zona de distensión que abarca las provincias norteñas de Alepo, Hama, Latakia y la de Idleb.
De acuerdo con los reportes los extremistas abrieron fuego de mortero contra la zona de Mogabo, en Alepo y lanzados desde el área de Rashidin, una región que abarca la zona de tregua acordada recientemente.
“De momento no hay víctimas, solo daños materiales”, indicaron las fuentes para agregar que los grupos terroristas violan constantemente los acuerdos y en las últimas horas provocaron al menos tres heridos.
Igual ocurrió tras ataques e infiltraciones rechazadas en Hama y Latakia, informándose que en esta última, un soldado sirio murió en los enfrentamientos, sin ofrecer más detalles al respecto.
Mientras, en la frontera sur administrtativa con la de Idleb, tres centenares de civiles abandonaron el área por el paso humanitario de Abu Duhur, establecido en las últimas semanas y controlado por la Policía Militar rusa y efectivos del Ejército sirio.
Las noticias indicaron además, que el Tercer Cuerpo y la 10 División de las Fuerzas Armadas sirias, junto a milicias aliadas, continuaron la ofensiva en la sureña provincia de Sweida, en la localidad de Qabr Sheik.
Reportes en el terreno difundieron que lograron fijarse puntos militares en la profundidad de las Quebradas Rocosas, donde fueron elimninados al menos 10 terroristas del Estado Islámico, Daesh en árabe.
Los datos subrayaron que la compleja geografía de la región obliga a combates de unidades de reducido tamaño que se mueven entre zonas desérticas, cuevas y colinas donde aún el Daesh mantiene sus últimos focos de resistencia.
De igual forma, se subrayó que tras algo más de dos meses de ofensiva, la cifra de bajas entre las filas de los terroristas sobrepasan las 250 mientras que en el Ejército sirio y aliados, los caídos se acercan al centenar.
El extremo este de Sweida, una provincia a unos 120 kilómetros al sureste de Damasco, con un área de 5 550 kilómetros cuadrados y más de 400 000 habitantes, es el último bastión del Daesh en la región.